/ jueves 25 de abril de 2024

Punto y aparte | De visita por Cuauhtémoc

Promoviendo la lectura

El escritor inglés Francis Bacon sostenía que la lectura hacía al hombre completo y escribir lo hacía preciso. En Tailandia las personas le dedican más de nueve horas a la semana a la lectura, en China le dedican ocho y le siguen Egipto y Filipinas con 7.3 en promedio. La medición para los países de habla hispana indica que en España se leen 10.3 libros por año, en Argentina 5.4, en Chile 4.5 y en México 2.9.

El poco interés por la lectura en el país azteca es preocupante y sigue siendo la asignatura pendiente de toda la vida a pesar de los programas que se han hecho (o mal hecho) para tratar de animar a los mexicanos a leer más. En la Asociación de Editorialistas de Chihuahua tenemos la importante misión de promover la lectura y de participar con nuestros textos con aportaciones que dejen algo al lector que bien pudiera ser una crítica, una opinión, un apoyo para tomar alguna decisión o un momento de reflexión o de entretenimiento.

En esta tarea, integrantes de la AECHIH acudimos el viernes pasado a la ciudad de Cuauhtémoc a presentar nuestro más reciente libro titulado “Derechos Humanos, una Óptica Editorial”, mismo que ya habíamos hecho lo propio aquí en la capital y en Ciudad Juárez, en ambos lugares con gran éxito.

La hermosa ciudad manzanera nos recibió de cálida manera; desde que transitábamos por una excelente carretera íbamos recordando gratas experiencias en esta ciudad donde si algo caracteriza a su gente es su honestidad y amabilidad. El lugar, un agradable salón de un restaurante de comida española (principalmente) dirigido por Karla, la dueña del lugar, que al platicar con ella y decirle que mi madre preparó por muchos años la mejor paella de Chihuahua resultó que ella era su clienta desde niña y la recordaba con aprecio, coincidencias emocionantes de la vida.

El lugar se fue llenando poco a poco, entre los asistentes se encontraban maestros, directores de escuelas, directivos de organismos empresariales, empresarios, comunicadores de la región y alumnos de diversas instituciones de educación superior con quienes platicamos por un buen rato y nos contagiamos de su entusiasmo.

La presentación estuvo a cargo de dos damas y un caballero; la periodista Edna Martínez, conductora de Radio Universidad y ex vocera de la Asamblea Municipal Electoral; María de los Ángeles Ruiz, columnista de este rotativo y Premio Estatal de Periodismo en Derechos Humanos, y Kamel Athié, exdiputado y actual rector de la Universidad Tecnológica de Chihuahua. Los tres resaltaron, a su manera, la importancia de promover y hacer respetar los derechos humanos resaltando los escritos de todos los coautores de la obra.

Va pues desde este espacio mi agradecimiento a la gente de Cuauhtémoc por su presencia y amabilidad, en especial a mi amigo Luis Corral y a mi exalumna Norma Quezada, ya que sin ellos no hubiera sido posible este gran evento.

Mi agradecimiento también a Néstor Armendáriz, quien fue quien nos apoyó para la edición de este libro desde la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y a Javier González Mocken, nuevo titular de este organismo, quien también nos acompañó a la presentación del libro, para ambos, mi respeto.


Promoviendo la lectura

El escritor inglés Francis Bacon sostenía que la lectura hacía al hombre completo y escribir lo hacía preciso. En Tailandia las personas le dedican más de nueve horas a la semana a la lectura, en China le dedican ocho y le siguen Egipto y Filipinas con 7.3 en promedio. La medición para los países de habla hispana indica que en España se leen 10.3 libros por año, en Argentina 5.4, en Chile 4.5 y en México 2.9.

El poco interés por la lectura en el país azteca es preocupante y sigue siendo la asignatura pendiente de toda la vida a pesar de los programas que se han hecho (o mal hecho) para tratar de animar a los mexicanos a leer más. En la Asociación de Editorialistas de Chihuahua tenemos la importante misión de promover la lectura y de participar con nuestros textos con aportaciones que dejen algo al lector que bien pudiera ser una crítica, una opinión, un apoyo para tomar alguna decisión o un momento de reflexión o de entretenimiento.

En esta tarea, integrantes de la AECHIH acudimos el viernes pasado a la ciudad de Cuauhtémoc a presentar nuestro más reciente libro titulado “Derechos Humanos, una Óptica Editorial”, mismo que ya habíamos hecho lo propio aquí en la capital y en Ciudad Juárez, en ambos lugares con gran éxito.

La hermosa ciudad manzanera nos recibió de cálida manera; desde que transitábamos por una excelente carretera íbamos recordando gratas experiencias en esta ciudad donde si algo caracteriza a su gente es su honestidad y amabilidad. El lugar, un agradable salón de un restaurante de comida española (principalmente) dirigido por Karla, la dueña del lugar, que al platicar con ella y decirle que mi madre preparó por muchos años la mejor paella de Chihuahua resultó que ella era su clienta desde niña y la recordaba con aprecio, coincidencias emocionantes de la vida.

El lugar se fue llenando poco a poco, entre los asistentes se encontraban maestros, directores de escuelas, directivos de organismos empresariales, empresarios, comunicadores de la región y alumnos de diversas instituciones de educación superior con quienes platicamos por un buen rato y nos contagiamos de su entusiasmo.

La presentación estuvo a cargo de dos damas y un caballero; la periodista Edna Martínez, conductora de Radio Universidad y ex vocera de la Asamblea Municipal Electoral; María de los Ángeles Ruiz, columnista de este rotativo y Premio Estatal de Periodismo en Derechos Humanos, y Kamel Athié, exdiputado y actual rector de la Universidad Tecnológica de Chihuahua. Los tres resaltaron, a su manera, la importancia de promover y hacer respetar los derechos humanos resaltando los escritos de todos los coautores de la obra.

Va pues desde este espacio mi agradecimiento a la gente de Cuauhtémoc por su presencia y amabilidad, en especial a mi amigo Luis Corral y a mi exalumna Norma Quezada, ya que sin ellos no hubiera sido posible este gran evento.

Mi agradecimiento también a Néstor Armendáriz, quien fue quien nos apoyó para la edición de este libro desde la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y a Javier González Mocken, nuevo titular de este organismo, quien también nos acompañó a la presentación del libro, para ambos, mi respeto.