/ jueves 28 de marzo de 2024

Punto y Aparte | Los jóvenes frente a las elecciones

“La juventud es la sonrisa del porvenir ante un desconocido que es ese mismo porvenir”

  • Víctor Hugo

Si algo disfruto en mi actividad de maestro universitario es el hecho de convivir con mis alumnos por un rato, jóvenes que van a la mitad de su carrera profesional y que en teoría representan el futuro de nuestro estado, nuestro país, de nuestro mundo. Con ellos aparte de ver los temas financieros y bursátiles, propios de la materia que les imparto, también platico de otras cosas; me actualizan sobre los artistas de moda, sobre las series y las películas que valen la pena en las diversas plataformas, sobre el futbol nacional e internacional y en reciprocidad, de aquí para allá de repente se me ocurre darles algún consejo de vida que en algo les pueda servir.

De algo que me he dado cuenta recientemente es que a gran parte de los jóvenes con quienes interactúo, las elecciones del próximo mes de junio les vienen valiendo un soberano pepino; algunos conocen el nombre o el apellido de las damas que buscan presidir México, pero de los candidatos y candidatas a diputados, senadores y a la presidencia municipal no tienen idea, mucho menos de sus propuestas (de los que las tienen). Esta falta de interés es (tiene que ser) preocupante para toda la sociedad en su conjunto y desde luego que, en buena medida, los responsables son los que integran la llamada “clase política” que ha demostrado más de una vez que mientras son candidatos los abrazos y los besos están a la orden del día, pero que en cuanto llegan al poder esas promesas empeñadas simple y sencillamente encuentran lugar en el terreno de la invisibilidad y del olvido y asi ¿pos cómo?

El emitir un sufragio representa un acto de confianza hacia la persona votada y de amor hacia nuestro país. Pero, ¿cómo asimilar esto cuando las acciones de muchos políticos están alineadas con transas, corrupción y falta de capacidad para gobernar?; esto último trayendo como consecuencia escenarios de violencia que rebasan la capacidad de asombro y que ponen a nuestro país en los más altos estándares de desprestigio a nivel global. Si a buena parte de la juventud no les interesa el tema político ¿qué hemos hecho para que esto no suceda?, ¿permitiremos que en un futuro se sumen a la masa de personas corruptas? o peor tantito ¿permitiremos que sean víctimas de un sistema de gobierno obscuro?

Desde este noble espacio el llamado es a los candidatos y candidatas que buscarán el sufragio de la sociedad, si quieren que los jóvenes volteen a verlos, primero háganlo ustedes, ahí están, llenos de dinamismo, de ganas de salir adelante, háblenles con la verdad, son más listos de lo que ustedes creen. El cambio que requiere México tiene que ver con individuos honestos cuya labor sea en beneficio de toda la comunidad y no de enriquecimientos personales fuera de toda proporción.

A los jóvenes los invito a que conozcan a quienes buscan gobernarnos, analicen los perfiles, escuchen las propuestas y tomen su decisión, no permitan nunca que alguien más decida por ustedes. Conviertan esta crisis de desconfianza en una luz que nos permita ver que si puede haber un mejor mañana para todos. Buena chamba les espera.

Ande pues.

“La juventud es la sonrisa del porvenir ante un desconocido que es ese mismo porvenir”

  • Víctor Hugo

Si algo disfruto en mi actividad de maestro universitario es el hecho de convivir con mis alumnos por un rato, jóvenes que van a la mitad de su carrera profesional y que en teoría representan el futuro de nuestro estado, nuestro país, de nuestro mundo. Con ellos aparte de ver los temas financieros y bursátiles, propios de la materia que les imparto, también platico de otras cosas; me actualizan sobre los artistas de moda, sobre las series y las películas que valen la pena en las diversas plataformas, sobre el futbol nacional e internacional y en reciprocidad, de aquí para allá de repente se me ocurre darles algún consejo de vida que en algo les pueda servir.

De algo que me he dado cuenta recientemente es que a gran parte de los jóvenes con quienes interactúo, las elecciones del próximo mes de junio les vienen valiendo un soberano pepino; algunos conocen el nombre o el apellido de las damas que buscan presidir México, pero de los candidatos y candidatas a diputados, senadores y a la presidencia municipal no tienen idea, mucho menos de sus propuestas (de los que las tienen). Esta falta de interés es (tiene que ser) preocupante para toda la sociedad en su conjunto y desde luego que, en buena medida, los responsables son los que integran la llamada “clase política” que ha demostrado más de una vez que mientras son candidatos los abrazos y los besos están a la orden del día, pero que en cuanto llegan al poder esas promesas empeñadas simple y sencillamente encuentran lugar en el terreno de la invisibilidad y del olvido y asi ¿pos cómo?

El emitir un sufragio representa un acto de confianza hacia la persona votada y de amor hacia nuestro país. Pero, ¿cómo asimilar esto cuando las acciones de muchos políticos están alineadas con transas, corrupción y falta de capacidad para gobernar?; esto último trayendo como consecuencia escenarios de violencia que rebasan la capacidad de asombro y que ponen a nuestro país en los más altos estándares de desprestigio a nivel global. Si a buena parte de la juventud no les interesa el tema político ¿qué hemos hecho para que esto no suceda?, ¿permitiremos que en un futuro se sumen a la masa de personas corruptas? o peor tantito ¿permitiremos que sean víctimas de un sistema de gobierno obscuro?

Desde este noble espacio el llamado es a los candidatos y candidatas que buscarán el sufragio de la sociedad, si quieren que los jóvenes volteen a verlos, primero háganlo ustedes, ahí están, llenos de dinamismo, de ganas de salir adelante, háblenles con la verdad, son más listos de lo que ustedes creen. El cambio que requiere México tiene que ver con individuos honestos cuya labor sea en beneficio de toda la comunidad y no de enriquecimientos personales fuera de toda proporción.

A los jóvenes los invito a que conozcan a quienes buscan gobernarnos, analicen los perfiles, escuchen las propuestas y tomen su decisión, no permitan nunca que alguien más decida por ustedes. Conviertan esta crisis de desconfianza en una luz que nos permita ver que si puede haber un mejor mañana para todos. Buena chamba les espera.

Ande pues.