Pensiones Civiles del Estado y el titular de la Sección 42 del SNTE han dado la espalda a la docente de educación especial Karla Hamilton, quien tras sufrir un accidente de trabajo en 2013 le han negado el inicio de trámites para pensionarla y pese a sufrir una lesión intratable en la columna, sigue acudiendo a trabajar, por miedo a que la despidan.
Desde el accidente, a Karla le han aplicado siete inyecciones para bloquear el dolor en la columna y ha sido medicada con morfina y Tramadol debido a los intensos dolores, pero aun así tiene que presentarse a laborar, eso sí con una reducción salarial de un 60%, ordenado por un dictamen total permanente.
En agosto de 2013, Karla se encontraba ayudando a Perla, una joven con síndrome de Down, para que diera algunos pasos, sin embargo sufrió una caída y Karla intentó amortiguarle el golpe con su cuerpo, a los pocos minutos empezó a sentir un dolor terrible en la columna.
Los médicos que han tratado a Karla han determinado que no hay tratamiento funcional y por tanto el dolor lo tendrá hasta el final de su existencia.
Para Karla y su familia existe una cerrazón y soberbia por parte de los directivos de Pensiones, particularmente de la doctora Desiré Sagarnaga, quien ha evitado autorizar su pensión.
“No me dan respuesta, se me hace inhumano, siento que me están acorralando para que tome la decisión que ellos quieren”, dijo Hamilton.
Kinardo Hamilton, padre de Karla, denunció que no le ha sido autorizada una pensión o incapacidad del 100% debido a que funcionarios le han externado que “tendrían una avalancha de gente exigiendo ese porcentaje y aparte se les investigaría por parte de la Función Pública pensando que recibiríamos dinero a cambio de los dictámenes de porcentaje total”.
Cabe mencionar que el dictamen de Pensiones Civiles del Estado indicaba que “dejaba a criterio el cambio de actividad”, por la lesión en su columna, la Secretaría de Educación alegó no tener espacio en otras áreas para reubicar a Karla y evitar que hiciera actividades físicas.
“Necesita venir muerta o en una camilla para que me la incapaciten o me la pensionen”, asegura su padre.
Karla se ha enfrentado con la negación a atención médica al momento de registrar visitas a urgencias debido a que el sistema de Pensiones arroja que cuenta con un dictamen total permanente y a causa del mismo tampoco le pueden otorgar incapacidad.
Karla se desempeña como maestra de educación especial de apoyo en la escuela primaria Luis Urías, en el segundo año, manifiesta que tiene dolores insoportables y actualmente se han incrementado también en el cuello y la cabeza.
Te puede interesar: