/ domingo 3 de septiembre de 2023

Violencia desde Palacio Nacional, violencia en todo el país

El pasado 1 de septiembre el presidente, Andrés Manuel López Obrador, entregó al Congreso de la Unión su quinto informe de gobierno, sin duda, lo que ahí presentó son datos de un gobierno de un México imaginario porque el gobierno del México real es cruel, indiferente e indolente ante las múltiples problemáticas que atraviesa nuestro país. Su sexenio pinta como el más violento de la historia con más de 155 mil homicidios, 11 mujeres asesinadas al día, más de 40 mil personas desaparecidas y casi 50 periodistas asesinados.

La política de abrazos y no balazos tiene ensangrentadas las calles de México y el propio presidente acepta que su sexenio ya ha superado la cifra de homicidios dolosos respecto a las administraciones pasadas, sin embargo, en lugar de responsabilizar a su pésima estrategia de seguridad, responsabiliza a los gobiernos anteriores, sigue utilizando el mismo discurso que cuando llegó a la presidencia, parece que no se ha dado cuenta de que está ya en su quinto año de mandato, ya no hay cabida para seguir echando culpas.

Tampoco le importan las mujeres, la misoginia de la Cuarta Transformación permite que 11 mujeres sean asesinadas al día, en su administración se minimiza la violencia que reciben y cómo no se va a minimizar a esta problemática si el propio presidente desde sus mañaneras ha ejercido violencia en contra de mujeres y lo peor es que niega hacerlo cuando miles somos testigos, la violencia de género está tan normalizada en nuestra sociedad que incluso ejerciéndola en su máxima expresión, es decir, cometiendo feminicidio, éste pasa desapercibido para aquellos que quieren ignorarlo, sin embargo, no sucede así para las familias de las víctimas, que ruegan por justicia.

El acceso a la justicia debería ser un derecho para todos y no un privilegio para unos cuantos, más de 40 mil madres buscadoras de personas víctimas de desaparición pareciera que mendigan algo que por derecho les corresponde. El pasado 30 de agosto (día declarado como el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas) se llevaron a cabo diversas manifestaciones por parte de familiares que no conocen el paradero de sus hijos, hermanos, padres, etc. En estas manifestaciones se portaron lonas, fotografías, carteles con los nombres de las personas desaparecidas para visibilizar que faltan ellos y que siguen siendo buscados, lamentablemente, sin la ayuda del gobierno esa búsqueda se torna aún más complicada y dolosa.

Colectivos de madres buscadoras han pedido reunirse con el presidente López Obrador, pero éste las ha rechazado porque según él hay manipulación en los casos y prefiere evitar la “politiquería”, es lamentable que rinda este tipo de declaraciones que lo único que hacen es agravar la impunidad respecto a este grave delito. Lo mismo en el caso de la violencia hacia periodistas, si él mismo los violenta desde sus mañaneras, lo único que hace es alentar a que los demás lo hagan y el resultado es que en lo que va de su sexenio, casi 50 periodistas han sido asesinados.

La violencia que hoy se vive viene desde Palacio Nacional y el único consuelo es que cada vez falta menos para que su inquilino se vaya y llegue la persona que va a poner en orden a México, sin duda, la ciudadanía está convencida de quitar a Morena de la presidencia y darle paso a la verdadera política que será elegida en 2024.


El pasado 1 de septiembre el presidente, Andrés Manuel López Obrador, entregó al Congreso de la Unión su quinto informe de gobierno, sin duda, lo que ahí presentó son datos de un gobierno de un México imaginario porque el gobierno del México real es cruel, indiferente e indolente ante las múltiples problemáticas que atraviesa nuestro país. Su sexenio pinta como el más violento de la historia con más de 155 mil homicidios, 11 mujeres asesinadas al día, más de 40 mil personas desaparecidas y casi 50 periodistas asesinados.

La política de abrazos y no balazos tiene ensangrentadas las calles de México y el propio presidente acepta que su sexenio ya ha superado la cifra de homicidios dolosos respecto a las administraciones pasadas, sin embargo, en lugar de responsabilizar a su pésima estrategia de seguridad, responsabiliza a los gobiernos anteriores, sigue utilizando el mismo discurso que cuando llegó a la presidencia, parece que no se ha dado cuenta de que está ya en su quinto año de mandato, ya no hay cabida para seguir echando culpas.

Tampoco le importan las mujeres, la misoginia de la Cuarta Transformación permite que 11 mujeres sean asesinadas al día, en su administración se minimiza la violencia que reciben y cómo no se va a minimizar a esta problemática si el propio presidente desde sus mañaneras ha ejercido violencia en contra de mujeres y lo peor es que niega hacerlo cuando miles somos testigos, la violencia de género está tan normalizada en nuestra sociedad que incluso ejerciéndola en su máxima expresión, es decir, cometiendo feminicidio, éste pasa desapercibido para aquellos que quieren ignorarlo, sin embargo, no sucede así para las familias de las víctimas, que ruegan por justicia.

El acceso a la justicia debería ser un derecho para todos y no un privilegio para unos cuantos, más de 40 mil madres buscadoras de personas víctimas de desaparición pareciera que mendigan algo que por derecho les corresponde. El pasado 30 de agosto (día declarado como el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas) se llevaron a cabo diversas manifestaciones por parte de familiares que no conocen el paradero de sus hijos, hermanos, padres, etc. En estas manifestaciones se portaron lonas, fotografías, carteles con los nombres de las personas desaparecidas para visibilizar que faltan ellos y que siguen siendo buscados, lamentablemente, sin la ayuda del gobierno esa búsqueda se torna aún más complicada y dolosa.

Colectivos de madres buscadoras han pedido reunirse con el presidente López Obrador, pero éste las ha rechazado porque según él hay manipulación en los casos y prefiere evitar la “politiquería”, es lamentable que rinda este tipo de declaraciones que lo único que hacen es agravar la impunidad respecto a este grave delito. Lo mismo en el caso de la violencia hacia periodistas, si él mismo los violenta desde sus mañaneras, lo único que hace es alentar a que los demás lo hagan y el resultado es que en lo que va de su sexenio, casi 50 periodistas han sido asesinados.

La violencia que hoy se vive viene desde Palacio Nacional y el único consuelo es que cada vez falta menos para que su inquilino se vaya y llegue la persona que va a poner en orden a México, sin duda, la ciudadanía está convencida de quitar a Morena de la presidencia y darle paso a la verdadera política que será elegida en 2024.