/ miércoles 24 de enero de 2024

Andrés Guardado

Un famoso personaje comentó alguna vez que lo que uno ama con todas sus fuerzas, no siempre te ama de vuelta, y que realidad tan fuerte es esa. Hoy se viene a tocar este tema porque nuestro México es víctima de esa frase cuando de futbol se trata, somos un país loco enamorado por este deporte y lamentablemente a nivel mundial, ya sea de manera colectiva o individual, hemos tenido muchas menos grandezas de las que nos gustaría. Es por eso que hoy se le dedicará esta columna a una de esas hermosas excepciones, hoy hablaremos de José Andrés Guardado Hernández y su europea carrera.

Surgido de la academia rojinegra y en menos de un año desde su debut, se subió de último minuto al tren de la selección nacional rumbo al mundial de Alemania 2006 con Ricardo Lavolpe, en ese entonces “El Principito” no tenía idea de que tendría el récord de más copas mundiales disputadas. El adolescente de 19 años sólo disputó un partido en dicha copa, pero fue el más importante, aquella noche triste arruinada por Maxi Rodríguez. Bastaron unos cuantos minutos para que el mediocampista mexicano llamara la atención del mundo y un año después emigró a Europa, continente que sería su casa durante los próximos 16 años. El Deportivo la Coruña se hizo de sus servicios donde se convirtió en ídolo y se ganó el cariño de toda la afición por muchos motivos pero principalmente por quedarse en la institución después de haber descendido en España, el “Zorro Plateado” se sintió en deuda con el club que le abrió las puertas en el viejo continente y optó por quedarse una temporada más para volver a la primera división. La misión se logró y la deuda estaba saldada. A continuación nuestro principito tuvo un par de años donde no encontraría su rumbo ni su ritmo, ni con el Valencia ni con el Bayer Leverkusen, para después presentarse una oportunidad parte-aguas en su carrera. Sus 3 años en el PSV Eindhoven revivieron a lo máximo la carrera del mexicano, se ganó tanto el respeto del plantel que en poco tiempo vistió el gafete de capitán, se ganó tanto el cariño de la afición que el Philips se pintó de verde, blanco y rojo al sonar de la canción “Mi amigo Guardado”, y se ganó tanto la atención en Holanda que desde España volvieron a verlo con ojos de amor, en esta ocasión desde Sevilla, desde el Benito Villamarín. Llegaría al Betis en la temporada 2017/2018, 10 años después de haber dejado a su querido Atlas, quien se imaginaría que el Betis se convertiría en el equipo que más veces ha defendido Andrés Guardado y quién se imaginaría que Andrés Guardado se convertiría en el extranjero con más partido disputados en la historia del club, sí, con todo y el gafete de capitán sujeto a su brazo izquierdo, su siempre perfil favorito.

El capitán deja el Betis después de 6.5 temporadas, 218 partidos, una histórica Copa del Rey y muchísimos kilómetros recorridos, en medio de una emotiva despedida digna de recordarse eternamente en la historia de su amado Villamarín. Andrés Guardado es sinónimo de esfuerzo, trabajo, disciplina, liderazgo y personalidad. Un ejemplo para todos los jugadores mexicanos habidos y por haber, nada más y nada menos que el mexicano que más partidos ha disputado en Europa, y a todo esto todavía se le puede sumar su gran carrera con la Selección Nacional. Definitivamente en el podio de los mejores futbolistas aztecas de todos los tiempos. Es momento de que el principito vuelva a la liga que lo vio nacer, es momento de que el León disfrute de su futbol, es momento de que la afición mexicana se ponga de pie para recibirlo, es momento de que regrese a su país… el hijo pródigo.


Mario Ramírez / @LaFutboliza

Un famoso personaje comentó alguna vez que lo que uno ama con todas sus fuerzas, no siempre te ama de vuelta, y que realidad tan fuerte es esa. Hoy se viene a tocar este tema porque nuestro México es víctima de esa frase cuando de futbol se trata, somos un país loco enamorado por este deporte y lamentablemente a nivel mundial, ya sea de manera colectiva o individual, hemos tenido muchas menos grandezas de las que nos gustaría. Es por eso que hoy se le dedicará esta columna a una de esas hermosas excepciones, hoy hablaremos de José Andrés Guardado Hernández y su europea carrera.

Surgido de la academia rojinegra y en menos de un año desde su debut, se subió de último minuto al tren de la selección nacional rumbo al mundial de Alemania 2006 con Ricardo Lavolpe, en ese entonces “El Principito” no tenía idea de que tendría el récord de más copas mundiales disputadas. El adolescente de 19 años sólo disputó un partido en dicha copa, pero fue el más importante, aquella noche triste arruinada por Maxi Rodríguez. Bastaron unos cuantos minutos para que el mediocampista mexicano llamara la atención del mundo y un año después emigró a Europa, continente que sería su casa durante los próximos 16 años. El Deportivo la Coruña se hizo de sus servicios donde se convirtió en ídolo y se ganó el cariño de toda la afición por muchos motivos pero principalmente por quedarse en la institución después de haber descendido en España, el “Zorro Plateado” se sintió en deuda con el club que le abrió las puertas en el viejo continente y optó por quedarse una temporada más para volver a la primera división. La misión se logró y la deuda estaba saldada. A continuación nuestro principito tuvo un par de años donde no encontraría su rumbo ni su ritmo, ni con el Valencia ni con el Bayer Leverkusen, para después presentarse una oportunidad parte-aguas en su carrera. Sus 3 años en el PSV Eindhoven revivieron a lo máximo la carrera del mexicano, se ganó tanto el respeto del plantel que en poco tiempo vistió el gafete de capitán, se ganó tanto el cariño de la afición que el Philips se pintó de verde, blanco y rojo al sonar de la canción “Mi amigo Guardado”, y se ganó tanto la atención en Holanda que desde España volvieron a verlo con ojos de amor, en esta ocasión desde Sevilla, desde el Benito Villamarín. Llegaría al Betis en la temporada 2017/2018, 10 años después de haber dejado a su querido Atlas, quien se imaginaría que el Betis se convertiría en el equipo que más veces ha defendido Andrés Guardado y quién se imaginaría que Andrés Guardado se convertiría en el extranjero con más partido disputados en la historia del club, sí, con todo y el gafete de capitán sujeto a su brazo izquierdo, su siempre perfil favorito.

El capitán deja el Betis después de 6.5 temporadas, 218 partidos, una histórica Copa del Rey y muchísimos kilómetros recorridos, en medio de una emotiva despedida digna de recordarse eternamente en la historia de su amado Villamarín. Andrés Guardado es sinónimo de esfuerzo, trabajo, disciplina, liderazgo y personalidad. Un ejemplo para todos los jugadores mexicanos habidos y por haber, nada más y nada menos que el mexicano que más partidos ha disputado en Europa, y a todo esto todavía se le puede sumar su gran carrera con la Selección Nacional. Definitivamente en el podio de los mejores futbolistas aztecas de todos los tiempos. Es momento de que el principito vuelva a la liga que lo vio nacer, es momento de que el León disfrute de su futbol, es momento de que la afición mexicana se ponga de pie para recibirlo, es momento de que regrese a su país… el hijo pródigo.


Mario Ramírez / @LaFutboliza