/ miércoles 15 de noviembre de 2023

Con propuestas y voluntad

Estamos reivindicando la política universitaria. Nuestra fe, nuestra universidad y nuestra educación, todas y todos juntos, trabajaremos arduamente por recuperarla y jamás, volverla a dejar en manos de la corrupción. El día Jueves 9 de Noviembre la historia se escribió, y juntos, hemos podido llegar al Consejo Universitario de nuestra universidad.

Estamos contentos y emocionados por levantar la mano, reclamar las injusticias, defender a nuestros compañeros y poner en alto en nombre de nuestra alma mater. Comprometidos totalmente con las causas estudiantiles, estamos seguros de que nuestro movimiento marcará un parteaguas en la comunidad estudiantil, porque estamos enamorados de la política y que aún creemos en ella como una herramienta para cambiar las vidas. No nos achica ni nos da miedo decir que somos políticos, por que asumimos el reto de cambiar la percepción. No estamos asustados por asumir con valentía este gran reto; estamos emocionados y entusiasmados.

Queremos dignificar la labor política. Esa política que veía en mi casa; donde mi hermano ahorraba día con día del sueldo de su trabajo para poder cumplir cada una de sus propuestas, porque para él lo más importante siempre fue cumplir todo lo que prometió como Consejero Universitario. Esa clase de política que veía mientras crecía en la que mis papás se levantaban a las 5 de la mañana todos los días y regresaban a las 9 de la noche, donando de su sueldo para apoyar a sus estudiantes que batallaban más. Esa política que practica el alcalde Marco Bonilla, que camina de sol a sol todos los días por las calles de la ciudad siempre con una sonrisa en el rostro y sacrificando tiempo con su familia para poder cumplirle a la ciudad. Yo hablo de esa clase de política; la que cambia la vida, no que la arruina. A esa clase de políticos queremos pertenecer, una en donde el trabajo, los valores y el progreso sean los más grandes pilares de nuestra vocación de servicio.

La corrupción lastima. La lealtad y convicción hacia las tradiciones, valores familiares y trayectoria de las personas que nos han inspirado son el gran impedimento para desviarnos del camino y olvidar quienes somos y hacia donde vamos. Hemos visto como las tentaciones, la fama, el egocentrismo y la farándula consumen los ideales y la buena voluntad; a nosotros también nos han decepcionado los dirigentes, a nosotros también nos ha lastimado la omisión y el “no hacer nada”. Es por eso por lo que hoy queremos cambiar la dinámica, no llegamos hasta acá simplemente para “no hacer nada” o para “salir en la foto”. Estamos acá para debatir, objetar, responder y ayudar; nadie se va a quedar afuera. Llegamos a través de trabajo, esfuerzo, esperanza, resiliencia y disciplina. Por el cariño y el amor que le tenemos a nuestra escuela, quemamos nuestras naves y decidimos no mirar atrás hasta haber cumplido todo lo que prometimos.

Nos mueve más un sentido de trascendencia; estamos aquí para dejar algo a la posteridad, para que, así como muchos han podido cumplir sus sueños, nuestros amigos y compañeros de clase también lo hagan. La universidad ha marcado una gran etapa de nuestras vidas, hemos conocido a grandes personas dentro de las aulas y cada una de ellas ha cambiado nuestra vida de alguna forma. Hay un montón de cosas por hacer por todas y todos, que, con ganas, trabajo y gestión, todo podrá ser posible. Somos optimistas y estamos pensando en el como sí hacer las cosas, antes del como no hacerlas.

Nuestra victoria, lejos de ser comprada; fue trabajada, soñada e inspirada. Tolerancia cero a la corrupción e ineptitud, no replicaremos viejas mañanas y reprobamos por completo las malas prácticas. Somos un grupo de jóvenes honestos, transparentes y comprometidos con la labor política; soñamos con cambiar la realidad. Representamos un relevo generacional que sin duda alguna cambiará la forma de hacer política hoy en día, sin dinero y sin acarreo; sí con propuestas y voluntad.

A ti, que decidiste voltear a vernos, prometerte que nos verás más seguido. A ti, que aún no logramos convencerte, asegurarte que algún día lo haremos.

Gracias a todos, todas.


Estamos reivindicando la política universitaria. Nuestra fe, nuestra universidad y nuestra educación, todas y todos juntos, trabajaremos arduamente por recuperarla y jamás, volverla a dejar en manos de la corrupción. El día Jueves 9 de Noviembre la historia se escribió, y juntos, hemos podido llegar al Consejo Universitario de nuestra universidad.

Estamos contentos y emocionados por levantar la mano, reclamar las injusticias, defender a nuestros compañeros y poner en alto en nombre de nuestra alma mater. Comprometidos totalmente con las causas estudiantiles, estamos seguros de que nuestro movimiento marcará un parteaguas en la comunidad estudiantil, porque estamos enamorados de la política y que aún creemos en ella como una herramienta para cambiar las vidas. No nos achica ni nos da miedo decir que somos políticos, por que asumimos el reto de cambiar la percepción. No estamos asustados por asumir con valentía este gran reto; estamos emocionados y entusiasmados.

Queremos dignificar la labor política. Esa política que veía en mi casa; donde mi hermano ahorraba día con día del sueldo de su trabajo para poder cumplir cada una de sus propuestas, porque para él lo más importante siempre fue cumplir todo lo que prometió como Consejero Universitario. Esa clase de política que veía mientras crecía en la que mis papás se levantaban a las 5 de la mañana todos los días y regresaban a las 9 de la noche, donando de su sueldo para apoyar a sus estudiantes que batallaban más. Esa política que practica el alcalde Marco Bonilla, que camina de sol a sol todos los días por las calles de la ciudad siempre con una sonrisa en el rostro y sacrificando tiempo con su familia para poder cumplirle a la ciudad. Yo hablo de esa clase de política; la que cambia la vida, no que la arruina. A esa clase de políticos queremos pertenecer, una en donde el trabajo, los valores y el progreso sean los más grandes pilares de nuestra vocación de servicio.

La corrupción lastima. La lealtad y convicción hacia las tradiciones, valores familiares y trayectoria de las personas que nos han inspirado son el gran impedimento para desviarnos del camino y olvidar quienes somos y hacia donde vamos. Hemos visto como las tentaciones, la fama, el egocentrismo y la farándula consumen los ideales y la buena voluntad; a nosotros también nos han decepcionado los dirigentes, a nosotros también nos ha lastimado la omisión y el “no hacer nada”. Es por eso por lo que hoy queremos cambiar la dinámica, no llegamos hasta acá simplemente para “no hacer nada” o para “salir en la foto”. Estamos acá para debatir, objetar, responder y ayudar; nadie se va a quedar afuera. Llegamos a través de trabajo, esfuerzo, esperanza, resiliencia y disciplina. Por el cariño y el amor que le tenemos a nuestra escuela, quemamos nuestras naves y decidimos no mirar atrás hasta haber cumplido todo lo que prometimos.

Nos mueve más un sentido de trascendencia; estamos aquí para dejar algo a la posteridad, para que, así como muchos han podido cumplir sus sueños, nuestros amigos y compañeros de clase también lo hagan. La universidad ha marcado una gran etapa de nuestras vidas, hemos conocido a grandes personas dentro de las aulas y cada una de ellas ha cambiado nuestra vida de alguna forma. Hay un montón de cosas por hacer por todas y todos, que, con ganas, trabajo y gestión, todo podrá ser posible. Somos optimistas y estamos pensando en el como sí hacer las cosas, antes del como no hacerlas.

Nuestra victoria, lejos de ser comprada; fue trabajada, soñada e inspirada. Tolerancia cero a la corrupción e ineptitud, no replicaremos viejas mañanas y reprobamos por completo las malas prácticas. Somos un grupo de jóvenes honestos, transparentes y comprometidos con la labor política; soñamos con cambiar la realidad. Representamos un relevo generacional que sin duda alguna cambiará la forma de hacer política hoy en día, sin dinero y sin acarreo; sí con propuestas y voluntad.

A ti, que decidiste voltear a vernos, prometerte que nos verás más seguido. A ti, que aún no logramos convencerte, asegurarte que algún día lo haremos.

Gracias a todos, todas.