/ miércoles 25 de octubre de 2023

La Inteligencia Artificial y el ChatGPT

Por: Alma Lilia Sapién Aguilar

La Inteligencia Artificial, en el área de las ciencias de la computación, es el conjunto de sistemas o combinación de algoritmos, cuya intención es crear máquinas que imitan la inteligencia humana para realizar diferentes tareas con la información que recopilan. La Inteligencia Artificial no tiene como fin reemplazar a los seres humanos, sino por el contrario ayuda a tomar mejores decisiones, es un área que combina la ciencia informática y los datos para llevar a cabo la resolución de problemas.


Entre las inteligencias artificiales más conocidas y utilizadas actualmente que incluyen este tipo de tecnología se encuentran Netflix, Spotify, asistentes virtuales como Alexa, el asistente de Google o Siri, el traductor de Google, YouTube, redes sociales como Facebook, Instagram y Twitter, motores de ajedrez y juegos como Stockfish y AlphaZero, chatbots como ChatGPT, la conducción de vehículos autónomos como los creados por Tesla.


Así mismo la Inteligencia Artificial se ha aplicado en un extenso número de campos incluyendo la medicina, donde el aporte ha sido maravilloso en enfermedades o condiciones fisiológicas que antes no tenían remedio, en comercio de acciones, mercadotecnia digital, la educación, control robótico, leyes, percepción remota, descubrimientos científicos y juguetes entre otros. Todo esto lleva a reflexionar en los paradigmas que hasta ahora se había establecido como sociedad frente a la tecnología.


El ChatGPT, ahora muy de moda dentro de la Inteligencia Artificial, es esencialmente un robot virtual (chatbot) que responde una variedad de preguntas, realiza tareas por escrito, búsqueda de información y estructuración formal de resultados que si no se usan de manera adecuada puede provocar un estancamiento del lenguaje. Los estudiantes pueden utilizar esta herramienta para realizar tareas, pero si no se usa de manera adecuada puede impedir el poder desarrollar habilidades de redacción, estructuración de ideas, análisis y síntesis de la información, pensamiento crítico, entre otras.


Un aspecto importante del ChatGPT es el tema del plagio. Dado que opera por medio del entrenamiento de modelos y se basa en información disponible en internet como noticias, libros, artículos entre otros, las respuestas pueden traer texto publicado por ciertas personas sin que reciban el crédito respectivo. La falta de conocimiento de las fuentes obstaculiza reconocer sesgos o incluso mentiras, como en las noticias falsas. La dependencia por este tipo de herramientas puede provocar que el ser humano dependa cada vez más de una máquina para obtener resultados de una manera rápida, lo que conlleva cada vez más al mínimo esfuerzo mental.


En un mundo cada vez más digital es necesario adoptar la tecnología y la transformación digital para modificar la forma en que los estudiantes, las universidades y el personal se involucran e interactúan. La tecnología puede ser una herramienta extraordinaria para ampliar el pensamiento, sin embargo, esto también puede ser una amenaza importante para quienes utilizan estos sistemas a ciegas, sin críticas ni interrogantes a la moral y la ética. Esto no es sólo un peligro individual, sino para toda la sociedad.


Por: Alma Lilia Sapién Aguilar

La Inteligencia Artificial, en el área de las ciencias de la computación, es el conjunto de sistemas o combinación de algoritmos, cuya intención es crear máquinas que imitan la inteligencia humana para realizar diferentes tareas con la información que recopilan. La Inteligencia Artificial no tiene como fin reemplazar a los seres humanos, sino por el contrario ayuda a tomar mejores decisiones, es un área que combina la ciencia informática y los datos para llevar a cabo la resolución de problemas.


Entre las inteligencias artificiales más conocidas y utilizadas actualmente que incluyen este tipo de tecnología se encuentran Netflix, Spotify, asistentes virtuales como Alexa, el asistente de Google o Siri, el traductor de Google, YouTube, redes sociales como Facebook, Instagram y Twitter, motores de ajedrez y juegos como Stockfish y AlphaZero, chatbots como ChatGPT, la conducción de vehículos autónomos como los creados por Tesla.


Así mismo la Inteligencia Artificial se ha aplicado en un extenso número de campos incluyendo la medicina, donde el aporte ha sido maravilloso en enfermedades o condiciones fisiológicas que antes no tenían remedio, en comercio de acciones, mercadotecnia digital, la educación, control robótico, leyes, percepción remota, descubrimientos científicos y juguetes entre otros. Todo esto lleva a reflexionar en los paradigmas que hasta ahora se había establecido como sociedad frente a la tecnología.


El ChatGPT, ahora muy de moda dentro de la Inteligencia Artificial, es esencialmente un robot virtual (chatbot) que responde una variedad de preguntas, realiza tareas por escrito, búsqueda de información y estructuración formal de resultados que si no se usan de manera adecuada puede provocar un estancamiento del lenguaje. Los estudiantes pueden utilizar esta herramienta para realizar tareas, pero si no se usa de manera adecuada puede impedir el poder desarrollar habilidades de redacción, estructuración de ideas, análisis y síntesis de la información, pensamiento crítico, entre otras.


Un aspecto importante del ChatGPT es el tema del plagio. Dado que opera por medio del entrenamiento de modelos y se basa en información disponible en internet como noticias, libros, artículos entre otros, las respuestas pueden traer texto publicado por ciertas personas sin que reciban el crédito respectivo. La falta de conocimiento de las fuentes obstaculiza reconocer sesgos o incluso mentiras, como en las noticias falsas. La dependencia por este tipo de herramientas puede provocar que el ser humano dependa cada vez más de una máquina para obtener resultados de una manera rápida, lo que conlleva cada vez más al mínimo esfuerzo mental.


En un mundo cada vez más digital es necesario adoptar la tecnología y la transformación digital para modificar la forma en que los estudiantes, las universidades y el personal se involucran e interactúan. La tecnología puede ser una herramienta extraordinaria para ampliar el pensamiento, sin embargo, esto también puede ser una amenaza importante para quienes utilizan estos sistemas a ciegas, sin críticas ni interrogantes a la moral y la ética. Esto no es sólo un peligro individual, sino para toda la sociedad.