Lo habitual es desearnos parabienes, salud, y todo lo que cada quien desee para ser feliz, pero este año en realidad debería llamarnos a la reflexión sincera de lo que ocurre a nuestro alrededor, tendremos un proceso electoral que será definitorio para nuestro país, podemos enumerar todos los acontecimientos que alcance nuestra memoria para aclarar el panorama actual, nuestro país atraviesa por serios problemas que coloca en riesgo nuestros principales derechos que damos por sentado o ya resueltos, libertad, democracia, libre tránsito, incluso el derecho a la vida, sin mencionar nuestro derecho a la salud, a la seguridad, a una vida digna.
En realidad, ¿tenemos a salvo estos derechos?, hoy en pleno año electoral debemos iniciar por analizar lo básico.
Vivimos en comunidad, nuestros vecinos, parientes, familia, amigos, compañeros, que opinan al respecto.
Los acontecimientos diarios de lo que ocurre no muy lejano a nosotros, en otros estados de la república, de cómo sigue y sigue la ola de violencia que parece interminable, donde los grupos delictivos continúan fortaleciendo su capacidad operativa, porque la autoridad, el gobierno federal continúa con su fallida estrategia de los abrazos no balazos y deja que los criminales hagan y deshagan.
Los migrantes son carne de cañón para el crimen organizado, los secuestran para ingresarlos a sus filas, así mismo está ocurriendo con grupos de personas de alta marginación, comunidades enteras siguen asoladas por las bandas criminales,
Los cárteles de la droga endurecen sus prácticas y actúan en total impunidad.
Sembrando el terror en comunidades en Guerrero, Michoacán o el Estado de México, por mencionar algunos.
Lo ocurrido en Texcaltitlán del Estado de México es lo que ocurre en una tierra sin ley, hacer justicia por su propia mano.
El enfrentamiento entre pobladores y miembros de un cártel derivado de un cobro de derecho de piso a los agricultores, estos optan por defender su patrimonio, sus familias, y al borde de la desesperación se lanzan contra los criminales, mueren de ambos lados, en otra localidad en Guerrero una banda delictiva lanza drones con misiles abatiendo a familias completas dentro de sus propias viviendas, estas acciones se están asemejando a actos terroristas, es inverosímil lo que estamos viviendo.
El proceso electoral del 2024 no es un simple proceso, de verdad va la vida de nuestros hijos, su futuro, que queremos para ellos, un país devastado e inundado en el crimen, o la posibilidad de restablecer el orden y la paz social como la base de un desarrollo sostenible.
México inició el año con 308 homicidios en la primera semana, por todo esto mi mayor deseo para usted amable lector es el México en paz que merecen nuestras familias.
Ing. Rocío Reza Gallegos
Diputada Federal
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