/ miércoles 6 de marzo de 2024

Defendamos Chihuahua

Pues ya iniciamos de manera “formal” las campañas federales, a la Presidencia de la República; del Senado; y diputaciones federales, y digo esto porque, algunos arrancaron hace poco más de un año, y entre los arranques de campaña, la guerra de encuestas y las redes sociales, vivimos intensamente el tiempo electoral.

También ya contamos y podemos tener por parte de las candidatas y candidato propuestas muy concretas al menos, de los temas de mayor interés para los mexicanos, el tema de seguridad nacional y el tema económico. Ya podemos ir comparando, analizando, evaluando y desmenuzando dichas propuestas y con base en ello, tomar la mejor decisión para México.Y es aquí donde además de las propuestas, me detengo a reflexionar sobre la frase “Defendamos Chihuahua”, que no es sólo una frase o eslogan de campaña, tiene un amplio y profundo sentido para quienes estamos en el lado opositor.

La crisis de inseguridad en el país por la política incapaz del presidente para combatir a los criminales; la crisis de salud y seguridad social, que ha llegado a sus máximos precisamente en este contexto electoral, sin citas, sin medicamentos, sin vivienda, sin guarderías y lo que se sume en este último lapso del gobierno federal; el abandono a las mujeres con estancias infantiles, escuelas de tiempo completo y la violencia que muchas enfrentan en donde el gobierno es omiso y hasta represor; la crisis para acceder a mejores condiciones económicas, ya que el gobierno difunde la política del conformismo, porque a pesar del incremento al salario mínimo, no se atendió con eficacia la inflación que creó aumentos descomunales en la canasta básica; la crisis en el campo que ante la gran sequía que enfrentamos el gobierno federal desapareció fondos que apoyaban el sector primario.

No debemos olvidar también la terquedad perversa de la cuatro T, en la voz del presidente para desaparecer, al INE, el INAI y otras instituciones, pero lo que es peor, su cantado plan C para terminar con la autonomía y competencia del Poder Judicial, que no debemos tomarlo a la ligera, porque la realidad, es que si ellos llegan a tener la mayoría calificada en la próxima legislatura esto será un hecho, del que por décadas no podremos salir; no olvidar también la desaparición de los fondos para la seguridad social, para la atención de las enfermedades catastróficas y desastres naturales.

Por lo anterior, es donde tiene sentido la frase, defendamos a Chihuahua, tiene su fuerza en reconstruir lo que el gobierno federal nos quitó, atender con responsabilidad los temas que más le duelen a la ciudadanía, seguridad, salud, economía, y evitar que vayan por aquellos proyectos que terminaran con nuestra república, nuestras libertades. Con fuerza y corazón, defendamos Chihuahua, defendamos México. Los necesitamos a todos. Seguimos.

Pues ya iniciamos de manera “formal” las campañas federales, a la Presidencia de la República; del Senado; y diputaciones federales, y digo esto porque, algunos arrancaron hace poco más de un año, y entre los arranques de campaña, la guerra de encuestas y las redes sociales, vivimos intensamente el tiempo electoral.

También ya contamos y podemos tener por parte de las candidatas y candidato propuestas muy concretas al menos, de los temas de mayor interés para los mexicanos, el tema de seguridad nacional y el tema económico. Ya podemos ir comparando, analizando, evaluando y desmenuzando dichas propuestas y con base en ello, tomar la mejor decisión para México.Y es aquí donde además de las propuestas, me detengo a reflexionar sobre la frase “Defendamos Chihuahua”, que no es sólo una frase o eslogan de campaña, tiene un amplio y profundo sentido para quienes estamos en el lado opositor.

La crisis de inseguridad en el país por la política incapaz del presidente para combatir a los criminales; la crisis de salud y seguridad social, que ha llegado a sus máximos precisamente en este contexto electoral, sin citas, sin medicamentos, sin vivienda, sin guarderías y lo que se sume en este último lapso del gobierno federal; el abandono a las mujeres con estancias infantiles, escuelas de tiempo completo y la violencia que muchas enfrentan en donde el gobierno es omiso y hasta represor; la crisis para acceder a mejores condiciones económicas, ya que el gobierno difunde la política del conformismo, porque a pesar del incremento al salario mínimo, no se atendió con eficacia la inflación que creó aumentos descomunales en la canasta básica; la crisis en el campo que ante la gran sequía que enfrentamos el gobierno federal desapareció fondos que apoyaban el sector primario.

No debemos olvidar también la terquedad perversa de la cuatro T, en la voz del presidente para desaparecer, al INE, el INAI y otras instituciones, pero lo que es peor, su cantado plan C para terminar con la autonomía y competencia del Poder Judicial, que no debemos tomarlo a la ligera, porque la realidad, es que si ellos llegan a tener la mayoría calificada en la próxima legislatura esto será un hecho, del que por décadas no podremos salir; no olvidar también la desaparición de los fondos para la seguridad social, para la atención de las enfermedades catastróficas y desastres naturales.

Por lo anterior, es donde tiene sentido la frase, defendamos a Chihuahua, tiene su fuerza en reconstruir lo que el gobierno federal nos quitó, atender con responsabilidad los temas que más le duelen a la ciudadanía, seguridad, salud, economía, y evitar que vayan por aquellos proyectos que terminaran con nuestra república, nuestras libertades. Con fuerza y corazón, defendamos Chihuahua, defendamos México. Los necesitamos a todos. Seguimos.