/ miércoles 15 de noviembre de 2023

Presupuesto 2024, centralista y electorero

El presupuesto para el siguiente año es el mayor en la historia del país, pero desafortunadamente, solo servirá para seguir inyectando recursos a proyectos que no aportan a México desarrollo y solo se están convirtiendo en un lastre que todos pagamos y seguiremos pagando por varias décadas.

El presupuesto aprobado es un presupuesto completamente insensible. No es posible que a pesar de la tragedia en Guerrero, Morena y el Gobierno no hayan hecho una sola asignación fija, directa y no condicionada de recursos para rescatar a Acapulco y otros municipios. Ni siquiera validaron la reserva con la que los excedentes petroleros servirían para en una parte financiar la reconstrucción de Guerrero.

Además, el presupuesto aprobado también es autoritario y vengativo. Recortaron millones de pesos a órganos autónomos y a los otros Poderes. No les bastó con la iniciativa retrógrada para destruir 13 fideicomisos con 15 mil millones de pesos; continúan en sus intentos de asfixiar la operatividad de todos aquellos órganos que no se doblegan al poder, intentando llevarlo a la inoperancia, como el INAI, el INE y el Tribunal Federal Electoral, es claro que al Presidente no le gustan los contrapesos y quien está sufriendo esta venganza personal son los órganos autónomos y el Poder Judicial de la Federación.

También es un presupuesto centralista, pues en un claro intento de seguir poniendo todo el recurso a disposición del titular del ejecutivo, minan aún más a estados y municipios, que cada vez reciben menos fondos para hacer su trabajo de cara a la ciudadanía. Hacen todo lo posible para obligar a presidentes municipales y a gobernadores a depender del gobierno federal, buscan tenerlos sometidos, arrodillados, solicitando recursos a la puerta del Presidente.

Pero sobre todo este presupuesto es clientelar y electorero, con un altísimo endeudamiento, y donde crecen los apoyos con los que más adelante intentarán manipular el voto, o dicho de otro modo, con el que financiarán su estructura electoral, a costa de la propia gente.

En Acción Nacional nunca estaremos en contra de programas sociales que ayuden a quienes más lo necesitan, especialmente si pertenecen a uno de los sectores poblacionales más vulnerables. Lo que siempre reprobaremos es que utilicen el disfraz de los programas sociales engañando, manipulando a la gente, y quitándoles recursos en otros programas y rubros en donde más se necesitan como salud, seguridad, campo, educación, exonomía familiar, federalismlo, entre muchos otros.

En un balance general el grupo parlamentario del PAN y la oposición, hicimos propuestas tangibles, serias, responsables a manera de reservas, y las pusimos sobre la mesa, tal como lo señalamos con el Presupuesto Amplio por México, con el firme objetivo de cambiar las prioridades de gasto de este gobierno. Desafortunadamente, pudo más la obediencia ciega, ignoraron una serie de reservas que presentamos, con miras a fortalecer la cobertura de derechos humanos para las mujeres y hombres que habitan nuestro país, no cabe duda de que México merece más. Porque este gobierno, muy lejos de ponerse del lado de la gente como lo habían prometido, cada vez nos confirma más que prefiere utilizar los recursos a su conveniencia y de manera electoral, antes que apoyar a México y a su gente.


El presupuesto para el siguiente año es el mayor en la historia del país, pero desafortunadamente, solo servirá para seguir inyectando recursos a proyectos que no aportan a México desarrollo y solo se están convirtiendo en un lastre que todos pagamos y seguiremos pagando por varias décadas.

El presupuesto aprobado es un presupuesto completamente insensible. No es posible que a pesar de la tragedia en Guerrero, Morena y el Gobierno no hayan hecho una sola asignación fija, directa y no condicionada de recursos para rescatar a Acapulco y otros municipios. Ni siquiera validaron la reserva con la que los excedentes petroleros servirían para en una parte financiar la reconstrucción de Guerrero.

Además, el presupuesto aprobado también es autoritario y vengativo. Recortaron millones de pesos a órganos autónomos y a los otros Poderes. No les bastó con la iniciativa retrógrada para destruir 13 fideicomisos con 15 mil millones de pesos; continúan en sus intentos de asfixiar la operatividad de todos aquellos órganos que no se doblegan al poder, intentando llevarlo a la inoperancia, como el INAI, el INE y el Tribunal Federal Electoral, es claro que al Presidente no le gustan los contrapesos y quien está sufriendo esta venganza personal son los órganos autónomos y el Poder Judicial de la Federación.

También es un presupuesto centralista, pues en un claro intento de seguir poniendo todo el recurso a disposición del titular del ejecutivo, minan aún más a estados y municipios, que cada vez reciben menos fondos para hacer su trabajo de cara a la ciudadanía. Hacen todo lo posible para obligar a presidentes municipales y a gobernadores a depender del gobierno federal, buscan tenerlos sometidos, arrodillados, solicitando recursos a la puerta del Presidente.

Pero sobre todo este presupuesto es clientelar y electorero, con un altísimo endeudamiento, y donde crecen los apoyos con los que más adelante intentarán manipular el voto, o dicho de otro modo, con el que financiarán su estructura electoral, a costa de la propia gente.

En Acción Nacional nunca estaremos en contra de programas sociales que ayuden a quienes más lo necesitan, especialmente si pertenecen a uno de los sectores poblacionales más vulnerables. Lo que siempre reprobaremos es que utilicen el disfraz de los programas sociales engañando, manipulando a la gente, y quitándoles recursos en otros programas y rubros en donde más se necesitan como salud, seguridad, campo, educación, exonomía familiar, federalismlo, entre muchos otros.

En un balance general el grupo parlamentario del PAN y la oposición, hicimos propuestas tangibles, serias, responsables a manera de reservas, y las pusimos sobre la mesa, tal como lo señalamos con el Presupuesto Amplio por México, con el firme objetivo de cambiar las prioridades de gasto de este gobierno. Desafortunadamente, pudo más la obediencia ciega, ignoraron una serie de reservas que presentamos, con miras a fortalecer la cobertura de derechos humanos para las mujeres y hombres que habitan nuestro país, no cabe duda de que México merece más. Porque este gobierno, muy lejos de ponerse del lado de la gente como lo habían prometido, cada vez nos confirma más que prefiere utilizar los recursos a su conveniencia y de manera electoral, antes que apoyar a México y a su gente.