/ jueves 21 de marzo de 2024

Hacia una cultura de paz | Violencia, desigualdad y desempleo, en ese orden

Yanez_flor@hotmail.com

América Latina es el continente más desigual del mundo y México, es el país dentro de esa región con una alta desigualdad sólo superado por Brasil, Colombia, Guatemala, El Salvador y Honduras. Este fenómeno se ha mejorado en los últimos años, sin embargo, continúa siendo el más polarizado de los países de la OCED. Este es un problema doloroso y profundo para nuestro país. La poca movilidad social ha derivado en la incapacidad de una persona de mejorar sus condiciones económicas, laborales y educativas haciendo que este fenómeno se exacerbe. De acuerdo con el Informe de Movilidad Social, 49 de cada 100 personas que nacen en lo más bajo de la escalera social, se quedarán ahí y sólo el 5% de los hijos de padres sin estudios, lograrán entrar a la universidad.

La multinacional francesa de investigación de mercado Ipsos, realiza mes con mes encuestas mundiales que miden el pulso de la opinión pública en México y el mundo. En febrero de 2024 publicó el estudio “Lo que preocupa al mundo” con los problemas sociales y políticos más urgentes de 29 países. La inflación es la inquietud número uno; le sigue el aumento de los precios; el crimen y la violencia; desempleo y, por último, los conflictos militares entre naciones. En el mismo informe específico de México, se enlistan las cinco mayores intranquilidades de la población. En primer lugar, se coloca el crimen y la violencia, luego la desigualdad social, el desempleo, la inflación y, al final, la corrupción. Respecto a los 29 países que componen el estudio, nuestro país se colocó en el nivel dos en violencia con respecto a la preocupación en el mismo tema que los otros países; octavo en pobreza e inequidad, vigésimo en corrupción, onceavo en desempleo y decimoséptimo en inflación.

Es decir, en México nos preocupa más el crimen y la violencia que ser pobres, tremendamente desiguales, sin trabajo y con altos grados de corrupción. El homicidio doloso durante la administración de AMLO comparada con las administraciones de Peña Nieto y de Calderón, creció 55.8% y 14.8% respectivamente. Los homicidios ya alcanzaron 110 por cada 100,000 habitantes y es imposible que el presidente logre corregir estas cifras a tan sólo unos meses de terminar su gestión. Ni volviendo a empezar lo podría hacer. El sexenio Morenista será recordado como el más violento de la historia del país, aunque el titular del ejecutivo asegure que tiene otros datos. Tampoco hay que olvidar las extorsiones, los desaparecidos, la trata de personas, la violencia de género y otros récords en delitos jamás antes vistos. Las estadísticas por lo general no mienten. López debió consultarlas y reestructurar su lista de prioridades a atacar, porque ciertamente gana “antes pobre que muerto”. Se la deja muy difícil a la presidentA que se erigirá el 2 de junio, cualquiera que esta sea. Xóchitl ha anunciado que la seguridad será el eje de su campaña y Claudia, la seguridad y justicia. Respecto al candidatito Jorge Álvarez Máynez, a ver qué se le ocurre. Esperemos que no le dejen la responsabilidad a la Iglesia de componer el panorama social.


Yanez_flor@hotmail.com

América Latina es el continente más desigual del mundo y México, es el país dentro de esa región con una alta desigualdad sólo superado por Brasil, Colombia, Guatemala, El Salvador y Honduras. Este fenómeno se ha mejorado en los últimos años, sin embargo, continúa siendo el más polarizado de los países de la OCED. Este es un problema doloroso y profundo para nuestro país. La poca movilidad social ha derivado en la incapacidad de una persona de mejorar sus condiciones económicas, laborales y educativas haciendo que este fenómeno se exacerbe. De acuerdo con el Informe de Movilidad Social, 49 de cada 100 personas que nacen en lo más bajo de la escalera social, se quedarán ahí y sólo el 5% de los hijos de padres sin estudios, lograrán entrar a la universidad.

La multinacional francesa de investigación de mercado Ipsos, realiza mes con mes encuestas mundiales que miden el pulso de la opinión pública en México y el mundo. En febrero de 2024 publicó el estudio “Lo que preocupa al mundo” con los problemas sociales y políticos más urgentes de 29 países. La inflación es la inquietud número uno; le sigue el aumento de los precios; el crimen y la violencia; desempleo y, por último, los conflictos militares entre naciones. En el mismo informe específico de México, se enlistan las cinco mayores intranquilidades de la población. En primer lugar, se coloca el crimen y la violencia, luego la desigualdad social, el desempleo, la inflación y, al final, la corrupción. Respecto a los 29 países que componen el estudio, nuestro país se colocó en el nivel dos en violencia con respecto a la preocupación en el mismo tema que los otros países; octavo en pobreza e inequidad, vigésimo en corrupción, onceavo en desempleo y decimoséptimo en inflación.

Es decir, en México nos preocupa más el crimen y la violencia que ser pobres, tremendamente desiguales, sin trabajo y con altos grados de corrupción. El homicidio doloso durante la administración de AMLO comparada con las administraciones de Peña Nieto y de Calderón, creció 55.8% y 14.8% respectivamente. Los homicidios ya alcanzaron 110 por cada 100,000 habitantes y es imposible que el presidente logre corregir estas cifras a tan sólo unos meses de terminar su gestión. Ni volviendo a empezar lo podría hacer. El sexenio Morenista será recordado como el más violento de la historia del país, aunque el titular del ejecutivo asegure que tiene otros datos. Tampoco hay que olvidar las extorsiones, los desaparecidos, la trata de personas, la violencia de género y otros récords en delitos jamás antes vistos. Las estadísticas por lo general no mienten. López debió consultarlas y reestructurar su lista de prioridades a atacar, porque ciertamente gana “antes pobre que muerto”. Se la deja muy difícil a la presidentA que se erigirá el 2 de junio, cualquiera que esta sea. Xóchitl ha anunciado que la seguridad será el eje de su campaña y Claudia, la seguridad y justicia. Respecto al candidatito Jorge Álvarez Máynez, a ver qué se le ocurre. Esperemos que no le dejen la responsabilidad a la Iglesia de componer el panorama social.