/ miércoles 13 de marzo de 2019

Homeostasis

Incertidumbre



Se cumplen cien días de que Andrés Manuel López Obrador tomó protesta, y en las encuestas de los expertos se menciona hasta un 85% de aceptación para el presidente.

Se rinde el lunes un informe donde se menciona que todo va viento en popa, y que México va muy bien.

Los bombos y platillos resuenan pero las cifras se empiezan a congelar, en diciembre se perdieron 375,000 empleos al inicio de la administración, el presupuesto se ha reorganizado y disminuido para muchos rubros que llegaban a los estados de la república, muchas personas han sido despedidos, los dineros de varias instituciones importantes para el desarrollo de actividades básicas para la generación de políticas públicas han sido gravemente afectados.

La sociedad civil empieza a ser relegada, porque se le acusa de “fifí”, y utilitaria, pero yo conozco muchas OSC que son de izquierda férrea, que durante muchos años estuvieron funcionando en la sociedad haciendo escuchar sus voces ante el gobierno para generar cambios en el rumbo del país y recibían recursos de los tan apestados gobiernos neoliberales que tanto menciona el presidente como algo muy malo.

Pemex es la empresa más endeudada quizás del mundo entero, y su situación financiera se ve complicada, sobre todo con el debut de los nuevos administradores, que en una reunión en Wall Street, donde está el dinero del financiamiento de la deuda, la presentación del plan de negocios, dejó mucho que desear y generó gran desconfianza, al grado que se sugirió la renuncia de estos personajes.

Las rondas de licitación están congeladas por lo menos en los próximos tres años, y eso no ayuda a darle buena perspectiva a Pemex, y regalar el dinero del presupuesto para incentivar el gasto de la clientela política, perdón, de los ciudadanos inscritos en los programas sociales, será llamarada de petate, porque sin inversión extranjera, no habrá dinero que alcance para poder financiar estos apoyos.

Es pues que el balance no lo apuesto positivo, aunque diga el presidente que una recesión se ve muy lejana, la desaceleración empieza a sentirse.

Pero como digo, tiempo al tiempo, no hay más, creo que el tiempo es el mejor maestro, y es una balanza justa, no da más de lo que en realidad es.

Espero no sea a costa de las oportunidades de las generaciones a las que les corresponde por derecho en la etapa productiva en la que se encuentran, lograr consolidar su patrimonio, y poder hacer realidad sus proyectos.

Agradezco mucho el favor de su atención, gracias y sigo a sus órdenes para cualquier comentario.

@MarAlmeyda coherencia.mx comentariosaloescrito@gmail.com


Incertidumbre



Se cumplen cien días de que Andrés Manuel López Obrador tomó protesta, y en las encuestas de los expertos se menciona hasta un 85% de aceptación para el presidente.

Se rinde el lunes un informe donde se menciona que todo va viento en popa, y que México va muy bien.

Los bombos y platillos resuenan pero las cifras se empiezan a congelar, en diciembre se perdieron 375,000 empleos al inicio de la administración, el presupuesto se ha reorganizado y disminuido para muchos rubros que llegaban a los estados de la república, muchas personas han sido despedidos, los dineros de varias instituciones importantes para el desarrollo de actividades básicas para la generación de políticas públicas han sido gravemente afectados.

La sociedad civil empieza a ser relegada, porque se le acusa de “fifí”, y utilitaria, pero yo conozco muchas OSC que son de izquierda férrea, que durante muchos años estuvieron funcionando en la sociedad haciendo escuchar sus voces ante el gobierno para generar cambios en el rumbo del país y recibían recursos de los tan apestados gobiernos neoliberales que tanto menciona el presidente como algo muy malo.

Pemex es la empresa más endeudada quizás del mundo entero, y su situación financiera se ve complicada, sobre todo con el debut de los nuevos administradores, que en una reunión en Wall Street, donde está el dinero del financiamiento de la deuda, la presentación del plan de negocios, dejó mucho que desear y generó gran desconfianza, al grado que se sugirió la renuncia de estos personajes.

Las rondas de licitación están congeladas por lo menos en los próximos tres años, y eso no ayuda a darle buena perspectiva a Pemex, y regalar el dinero del presupuesto para incentivar el gasto de la clientela política, perdón, de los ciudadanos inscritos en los programas sociales, será llamarada de petate, porque sin inversión extranjera, no habrá dinero que alcance para poder financiar estos apoyos.

Es pues que el balance no lo apuesto positivo, aunque diga el presidente que una recesión se ve muy lejana, la desaceleración empieza a sentirse.

Pero como digo, tiempo al tiempo, no hay más, creo que el tiempo es el mejor maestro, y es una balanza justa, no da más de lo que en realidad es.

Espero no sea a costa de las oportunidades de las generaciones a las que les corresponde por derecho en la etapa productiva en la que se encuentran, lograr consolidar su patrimonio, y poder hacer realidad sus proyectos.

Agradezco mucho el favor de su atención, gracias y sigo a sus órdenes para cualquier comentario.

@MarAlmeyda coherencia.mx comentariosaloescrito@gmail.com