/ jueves 8 de noviembre de 2018

La consulta ¿necesaria?

“Si tienes que preguntarlo, nunca lo sabrás”

- Armstrong -

Conversación sostenida en esta ciudad entre un joven (J) que custodiaba celosamente la caja receptora y una señora (S) que circunstancialmente pasaba por el lugar:

(S) Buenos días, ¿de qué se trata esto, joven?

(J) Le estamos consultado a los ciudadanos si desean que continúe la construcción del nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco, o que mejor se realice en Santa Lucía.

(S) Oiga, pero yo nunca viajo en avión, ni conozco México.

(J) No importa, doña, aun así puede votar.

(S) Pues de Texcoco he escuchado algo, pero ¿dónde queda Santa Lucía?

(J) Híjole señito, ahí sí no sabría decirle, yo tampoco conozco México.

(S) Voy a votar por Santa Lucía porque así se llama mi cuñada.

(J) Ah pues mire, tiene un buen motivo, ojalá y gane esa opción.

(S) Gracias.

(J) De nada señito, vaya con Dios.


El atrevido lector puede cambiar los personajes y las palabras de esta conversación, no importa, lo que interesa es el mensaje que nos deja esta escena ante una situación de trascendencia para nuestro país. Habrá quienes piensen que se exagera mucho, créanme que no.

Cuando se nos consulta sobre determinado tema primero se tiene que conocer todo el entorno de la interrogante que nos presentan para tomar una decisión; el doctor no decide su diagnóstico si el paciente no le da a conocer los antecedentes del padecimiento; si se tenía la decisión de construir el aeropuerto en Texcoco fue porque ya se habían realizado estudios de factibilidad, así de sencillo.

Nuestro querido México no realizó ningún ejercicio democrático ni participativo con la llamada “consulta popular”, simplemente fue el mecanismo de autoayuda para tener un argumento en lo que representa una decisión tomada tiempo atrás y que de alguna manera sirvió para demostrar quién es el que ahora manda; maniobra política, dicen muchos.

Por supuesto que deseamos que al gobierno que entra en funciones el próximo mes le vaya bien, porque esto tiene que reflejarse en la calidad de vida de todos los mexicanos. El desarrollo económico de México tiene que enfrentarse con firmeza y hay decisiones que no se requieren consultar, simplemente tienen que ejercerse, para eso los elegimos, ¿o no?



“Si tienes que preguntarlo, nunca lo sabrás”

- Armstrong -

Conversación sostenida en esta ciudad entre un joven (J) que custodiaba celosamente la caja receptora y una señora (S) que circunstancialmente pasaba por el lugar:

(S) Buenos días, ¿de qué se trata esto, joven?

(J) Le estamos consultado a los ciudadanos si desean que continúe la construcción del nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco, o que mejor se realice en Santa Lucía.

(S) Oiga, pero yo nunca viajo en avión, ni conozco México.

(J) No importa, doña, aun así puede votar.

(S) Pues de Texcoco he escuchado algo, pero ¿dónde queda Santa Lucía?

(J) Híjole señito, ahí sí no sabría decirle, yo tampoco conozco México.

(S) Voy a votar por Santa Lucía porque así se llama mi cuñada.

(J) Ah pues mire, tiene un buen motivo, ojalá y gane esa opción.

(S) Gracias.

(J) De nada señito, vaya con Dios.


El atrevido lector puede cambiar los personajes y las palabras de esta conversación, no importa, lo que interesa es el mensaje que nos deja esta escena ante una situación de trascendencia para nuestro país. Habrá quienes piensen que se exagera mucho, créanme que no.

Cuando se nos consulta sobre determinado tema primero se tiene que conocer todo el entorno de la interrogante que nos presentan para tomar una decisión; el doctor no decide su diagnóstico si el paciente no le da a conocer los antecedentes del padecimiento; si se tenía la decisión de construir el aeropuerto en Texcoco fue porque ya se habían realizado estudios de factibilidad, así de sencillo.

Nuestro querido México no realizó ningún ejercicio democrático ni participativo con la llamada “consulta popular”, simplemente fue el mecanismo de autoayuda para tener un argumento en lo que representa una decisión tomada tiempo atrás y que de alguna manera sirvió para demostrar quién es el que ahora manda; maniobra política, dicen muchos.

Por supuesto que deseamos que al gobierno que entra en funciones el próximo mes le vaya bien, porque esto tiene que reflejarse en la calidad de vida de todos los mexicanos. El desarrollo económico de México tiene que enfrentarse con firmeza y hay decisiones que no se requieren consultar, simplemente tienen que ejercerse, para eso los elegimos, ¿o no?