En un momento muy complicado del Sistema Educativo Mexicano debido a la pandemia del coronavirus, se realiza el cambio del titular de la Secretaría de Educación Pública. La maestra Delfina Gómez Álvarez llega en sustitución de Esteban Moctezuma Barragán como nueva secretaria de Educación, designada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Uno de los principales atributos para presidir esta dependencia que se le reconoce a la nueva secretaria es haber sido maestra de grupo de primaria durante más de 17 años. Históricamente desde el primer secretario José Vasconcelos, no había ocupado este puesto ninguna maestra de grupo del nivel de educación básica, que representa este nivel el 70% de todo el sistema educativo. Posteriormente fue subdirectora auxiliar de Proyectos de la Secretaría de Educación del Estado de México y también fue directora de un colegio privado. Ya como diputada federal en el 2018 fue integrante de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos.
Ahora como nueva titular del organismo educativo uno de los principales retos que va a enfrentar la maestra Delfina en este fin de año es organizar en coordinación con algunos estados como Jalisco y Campeche el regreso escalonado a clases. Además la maestra Delfina tendrá que encabezar una buena organización con todas las demás autoridades estatales, para que la estrategia de los Centros Comunitarios de Aprendizaje realmente funcione con los objetivos que se han planteado dentro de todas las escuelas del país. El segundo reto que enfrentará la maestra Delfina será la aplicación de la nueva ley de Educación Superior aunada a una fuerte estrechez presupuestal. El principal problema que enfrentan todas las universidades públicas del país para el 2021 es la falta de presupuesto para poder mantener aun en medio de la pandemia la calidad de la operación universitaria en su totalidad. Se requiere mantener un diálogo constructivo con todos los rectores de las instituciones de educación superior, para la aplicación de la gratuidad universal sin afectar la sustentabilidad y pertinencia de todas las universidades. También como tercer reto tendrá que mantener buenas relaciones con el SNTE y con la CNTE, que inicialmente han manifestado su beneplácito por su nombramiento, especialmente las autoridades de la Coordinadora Nacional, pero hay en la mesa de negociación especialmente en el tema salarial aún muchos pendientes por resolver. Así que es un cambio en tiempos complicados, ya que el Sistema Educativo es uno de los sectores del gobierno federal que más requiere la aplicación y supervisión de políticas públicas de largo aliento que den estabilidad y pertinencia a todos los actores de la comunidad educativa. Esperemos que pueda mantener pronto y sin sobresaltos el rumbo y la marcha de todo el sistema educativo nacional.
