Esta semana el presidente de México sorprendió a todos al informar que el Ejército Mexicano se hará cargo del mantenimiento de carreteras, lo que a todas luces es una ocurrencia más del primer mandatario, pues la Secretaría de la Defensa Nacional no está preparada para tales funciones.
Chihuahua se encuentra en situación crítica en muchos de sus tramos carreteros, por ejemplo, en la vía corta a Parral o de a la rúa que conduce de la ciudad de Chihuahua a Juárez (principal arteria comercial del estado), y muchos otros más, que, sin temor a equivocarme, representan un riesgo para la integridad física de los conductores y, por otra parte, propician un impacto negativo relacionado con la economía.
Desafortunadamente, esta semana nos dimos cuenta de las primeras advertencias del gobierno de México, en el sentido de que se cancelarán los procesos de licitación relacionados con el mejoramiento de carreteras, esto por consideraciones presupuestarias, lo que, de consumarse, representaría un fuerte golpe para los chihuahuenses.
Históricamente, las carreteras, en cualquier lugar del mundo, han sido referente de progreso, de impulso a la economía y la conectividad, es por ello, que esta situación nos preocupa, pues cada sexenio se reduce de forma estrepitosa la inversión en este rubro, y los resultados de ello, están a la vista de todos.
Esta semana, el sector empresarial de la construcción en Chihuahua se reunió con la representante de la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transporte (SICT), en Chihuahua, Imelda Guerra Villalobos, quien dijo desconocer, hasta el momento, la cancelación de los procesos licitatorios arriba comentados.
Mostró un semblante relajado, y dijo estar en buena disposición para colaborar para mejorar las condiciones de las vías de nuestra entidad, sin embargo, dejó entrever que está a la espera de presupuesto para comenzar su implementación, lo que nos parece una medida urgente que no puede ser aplazada.
Para este 2024, dijo frente a los empresarios, el programa de conservación de carreteras proyecta una inversión de 420 millones de pesos, para una meta programada de 2 mil 625 km; caso contrario del estado, que, ante el acotamiento de recursos federales para esos fines, anunció la implementación de 4 mil millones de pesos para carreteras a su cargo.
Entonces, son evidentes las repercusiones que tiene el estado de Chihuahua ante la falta de apoyos por parte de la Federación, a pesar de que nuestra entidad se encuentra dentro de los 10 estados que le aportan mayor proporción al PIB nacional y es líder en exportaciones.
También, es importante hacer énfasis en que las carreteras en mal estado pueden afectar e inhibir cruciales inversiones, tanto nacionales como extranjeras, sobre todo con la nueva etapa que posiciona a Chihuahua como estado privilegiado para el nearshoring. Qué decir del impacto negativo que se puede generar en el turismo.
Sin embargo, apelando a la disposición de la funcionaria federal en Chihuahua, y a que consideramos que el adecuado mantenimiento y desarrollo de la infraestructura carretera deriva en beneficios para el sector empresarial y la sociedad en general, es que desde la Iniciativa Privada solicitamos se abra la llave de los recursos para estos fines y podamos colaborar el sector productivo, el gobierno estatal y la federación, en generar mejores condiciones de conectividad que potencien nuestra competitividad y nuestra economía.
