“Cuando desaparece de una nación toda su estructura social de año ésta se va directo al derrumbe” Alexis Carrel (1843 -1944)Nobel Medicina
“Que se vayan al carajo porque lo primero es la salud del pueblo”, condenó enfáticamente el presidente López Obrador hacia quienes han criticado la contratación de 500 médicos cubanos para trabajar en comunidades apartadas. Sin embargo no entendemos por qué el 8 de enero de 2020 declaró que a partir del 1 de diciembre de ese año México tendría un sistema de salud similar al de Dinamarca. Sencillamente diremos su sistema de salud coincide con Noruega por su gratuidad universal (el de mayor cobertura del mundo después de Islandia) existiendo una diferencia abismal al representar 16.7 veces más el presupuesto por persona en Noruega que en México (ver en Google datos SSaludMex y datos macro noruega.com), pero además en México el 28.3% de los mexicanos carecen de servicios médicos (Inegi 2020). Como nación nos encontramos en el puesto 76 del ránking del Índice de Desarrollo Humano (IDH) que observa en esta medición tres variables: vida larga y saludable, conocimientos y nivel de vida digna.
Pero aquí no termina este descalabro; el artículo 4º de la Constitución Mexicana reza entre otras cosas el Derecho a la Protección de la Salud (DPS) como un derecho humano. Lo mismo la concurrencia entre los distintos niveles de gobierno sobre la materia, de acuerdo con lo establecido en la fracción XVI del artículo 73 del mismo texto.
Hugo Chávez, virulento dictador de Venezuela, durante un mitin ante miles de “acarreados” realizado el 3 de agosto de 2012 en Caracas, celebraba la llegada triunfal del ejército de médicos de Cuba para atender gratuitamente en ese país a cientos de miles de venezolanos. Hoy, a una década de ese evento el sistema de salud de Venezuela se encuentra en estado vegetativo en el sitio 113 a nivel mundial, a grado tal que es difícil conseguir una tableta de paracetamol. La propia Organización Mundial de la Salud basada en la información estadística obtenida por John Hopkins University ha descalificado al dictador Nicolás Maduro, debido a la información falsa y tendenciosa donde señala frecuentemente vivir en una sociedad sana que poco enferma.
En esa misma ruta está caminando México hacia un adoctrinamiento socialista de las clases más desprotegidas; o qué acaso habría de ser distinta a la de Venezuela en cuanto a sus resultados, siendo el mismo modelo y estrategia.
Se estima que hay 305,418 médicos en nuestro país vigilando nuestra salud con una paga mensual promedio de 16,146 pesos, donde se carece de la infraestructura adecuada para tal fin. Por tanto la llegada de 500 médicos cubanos a México ha sido criticada por ser una forma de competencia desleal. En Chihuahua y Ciudad Juárez la noticia fue recibida con enojo, más en los cinco centros universitarios donde se cursa esta carrera.
El presidente para tratar de mediar esta inconformidad ante 52 mil médicos desempleados, se comprometió a contratar a través del IMSS e ISSSTE a 13,765 especialistas correspondiéndole a Chihuahua 291 especialistas, que escuchando expertos en salud al destinarlos a zonas rurales, tendrán el mismo alcance por ausencia de infraestructura que los médicos urbanos del conocido Dr. Simi.
