/ jueves 5 de noviembre de 2020

Logística 4.0


El desarrollo tecnológico y la feroz competencia de empresas como Amazon están obligando a las empresas de todos tamaños a implementar soluciones tecnológicas cada vez más complejas.

En este sentido, se ha estado acuñando el término de Logística 4.0, que en resumen es la interconectividad de todos los procesos dentro de la cadena de suministro.

Esta interconectividad incluye todos los aspectos que hacen que un producto se forme y se vaya moviendo desde el suministro de sus componentes, hasta las manos del consumidor. Inclusive, después de llegar al consumidor, dar el seguimiento y el servicio necesario para que el cliente esté satisfecho.

Todo el proceso inicia con el cálculo de las proyecciones de las ventas en base a la historia de ventas y condiciones del mercado. Estas proyecciones se podrán ir alterando en tiempo real si se incorporan elementos de inteligencia artificial en los sistemas predictivos. Con base en esas proyecciones se establece el calendario de materia prima necesaria, necesidades de producción, al igual que las necesidades de distribución. Adicionalmente se podrá con esto estimar las necesidades de recursos financieros.

Una vez emitidas las órdenes de compra de las materias primas se podrá dar seguimiento automatizado de los pedidos y se esperarán los pedidos en el almacén con los dispositivos de lectura de código de barras para incorporarlos al sistema e iniciar los procesos de producción que podrán darle seguimiento a la producción con el uso de esta misma tecnología.

Ya para entonces se tendrán los pedidos de los clientes, a quienes de forma automática se les notificará de los envíos y se podrá dar seguimiento a la ruta mediante dispositivos de seguimiento satelital (GPS) o información recabada de los transportistas en forma automática para estar informando al cliente o a sus sistemas de la fecha y hora exacta de llegada de sus pedidos.

Esta nueva dinámica de operatividad de las empresas está estableciendo grandes retos a la industria, dado que los recursos financieros y acceso al conocimiento tecnológico no es en muchas ocasiones posible para la mayor parte de las empresas. Seguramente las grandes empresas exigirán cada vez más a sus proveedores que se incorporen a estas tecnologías. Esta realidad será una gran amenaza a las pequeñas empresas que ante la brecha digital no podrán ser competitivos.

Más que nunca las empresas pequeñas necesitan ayuda de las áreas gubernamentales para facilitar el ingreso de éstas a la utilización de plataformas tecnológicas y puedan así competir en un piso parejo con las grandes empresas. Por otro lado también se genera una oportunidad de negocio para que las pequeñas empresas puedan subcontratar los servicios tecnológicos a un menor costo y esfuerzo.


El desarrollo tecnológico y la feroz competencia de empresas como Amazon están obligando a las empresas de todos tamaños a implementar soluciones tecnológicas cada vez más complejas.

En este sentido, se ha estado acuñando el término de Logística 4.0, que en resumen es la interconectividad de todos los procesos dentro de la cadena de suministro.

Esta interconectividad incluye todos los aspectos que hacen que un producto se forme y se vaya moviendo desde el suministro de sus componentes, hasta las manos del consumidor. Inclusive, después de llegar al consumidor, dar el seguimiento y el servicio necesario para que el cliente esté satisfecho.

Todo el proceso inicia con el cálculo de las proyecciones de las ventas en base a la historia de ventas y condiciones del mercado. Estas proyecciones se podrán ir alterando en tiempo real si se incorporan elementos de inteligencia artificial en los sistemas predictivos. Con base en esas proyecciones se establece el calendario de materia prima necesaria, necesidades de producción, al igual que las necesidades de distribución. Adicionalmente se podrá con esto estimar las necesidades de recursos financieros.

Una vez emitidas las órdenes de compra de las materias primas se podrá dar seguimiento automatizado de los pedidos y se esperarán los pedidos en el almacén con los dispositivos de lectura de código de barras para incorporarlos al sistema e iniciar los procesos de producción que podrán darle seguimiento a la producción con el uso de esta misma tecnología.

Ya para entonces se tendrán los pedidos de los clientes, a quienes de forma automática se les notificará de los envíos y se podrá dar seguimiento a la ruta mediante dispositivos de seguimiento satelital (GPS) o información recabada de los transportistas en forma automática para estar informando al cliente o a sus sistemas de la fecha y hora exacta de llegada de sus pedidos.

Esta nueva dinámica de operatividad de las empresas está estableciendo grandes retos a la industria, dado que los recursos financieros y acceso al conocimiento tecnológico no es en muchas ocasiones posible para la mayor parte de las empresas. Seguramente las grandes empresas exigirán cada vez más a sus proveedores que se incorporen a estas tecnologías. Esta realidad será una gran amenaza a las pequeñas empresas que ante la brecha digital no podrán ser competitivos.

Más que nunca las empresas pequeñas necesitan ayuda de las áreas gubernamentales para facilitar el ingreso de éstas a la utilización de plataformas tecnológicas y puedan así competir en un piso parejo con las grandes empresas. Por otro lado también se genera una oportunidad de negocio para que las pequeñas empresas puedan subcontratar los servicios tecnológicos a un menor costo y esfuerzo.