/ jueves 12 de mayo de 2022

Perfil humano | Los retos de la postpandemia

Después de dos años la pandemia ha retrocedido en el mundo, por lo que parece que ya estamos en una etapa postpandémica, la cual no deja de presentar retos adversos como la inflación, el bajo crecimiento, la migración, el calentamiento global y desde luego la amenaza de una guerra global.

Una de las principales secuelas de la pandemia fue que se trastornó la economía mundial, por lo que su reactivación ha causado una inflación que no se daba desde hace décadas. Estados Unidos padece un alto índice inflacionario igual al de la década de los ochenta y México parecido al del inicio de este siglo, por citar dos ejemplos.

En nuestro país la inflación anual continúa afectando sobre todo los productos de la canasta básica, algunos cuyo costo es el doble al del año pasado, como el pollo y el limón. Unos 70 mil hogares chihuahuenses no alcanzan a cubrir la canasta básica, por lo cual están en pobreza alimentaria.

El gobierno federal para contrarrestar en algo los efectos de la inflación aplicó un paquete que incluye el control de los precios de 24 productos de la canasta básica llegando a un acuerdo con los grandes distribuidores de los mismos.

Esta medida es limitada y a corto plazo, por lo que no garantiza ser de gran impacto sino más bien es un intento de menguar los efectos inflacionarios inmediatos pues no está dirigido a combatir las causas principales.

Por ejemplo, subsidiar la gasolina para que no continúe subiendo de precio tendrá un costo anual de unos 400 mil millones de pesos, lo cual repercutirá en un déficit de las finanzas públicas.

Ahora bien, la mayoría de los factores inflacionarios son exógenos por lo que poco podría hacer el gobierno federal, más también no dejan de ser efecto de políticas económicas erróneas.

Así el bajo crecimiento económico pronosticado no garantiza la recuperación del país después del retroceso debido a la pandemia ya que no se presentan condiciones adecuadas para aumentar la inversión y el empleo.

A lo anterior se agrega el aumento alarmante de la migración debido a las crisis económicas y a la guerra en Ucrania. Un ejemplo de ello es el incremento notorio de cubanos en el país que huyen de la carestía y del desempleo en su país vendiendo para ello sus escasos bienes y aventurándose a enfrentar serios peligros con tal de llegar a los Estados Unidos.

Mas no sólo hay más emigrantes extranjeros, sino también nacionales que intentan cruzar la frontera norte para trabajar en el vecino país y contribuir al envío de remesas, la principal fuente de divisas nacional.

En cuanto al calentamiento global es alarmante el incremento de sequías e incendios en todo el orbe y sobre todo en el territorio nacional, ocupando Chihuahua uno de los primeros lugares.

En abril y mayo ya han predominado altas temperaturas que oscilan entre los 30 y 45 grados centígrados, lo que pronostica un verano seco y extremadamente caluroso con las consecuencias negativas para la economía y la salud de los mexicanos.

La perspectiva de la época postpandémica no es lo más favorable que se hubiera podido desear, por lo que además de la latente amenaza del regreso de la pandemia se tienen que afrontar los riesgos citados y otros más, lo cual desde luego no es el más deseado de los escenarios futuros por lo que debemos estar preparados para afrontarlos e intentar superarlos con los menores costos posibles.



Después de dos años la pandemia ha retrocedido en el mundo, por lo que parece que ya estamos en una etapa postpandémica, la cual no deja de presentar retos adversos como la inflación, el bajo crecimiento, la migración, el calentamiento global y desde luego la amenaza de una guerra global.

Una de las principales secuelas de la pandemia fue que se trastornó la economía mundial, por lo que su reactivación ha causado una inflación que no se daba desde hace décadas. Estados Unidos padece un alto índice inflacionario igual al de la década de los ochenta y México parecido al del inicio de este siglo, por citar dos ejemplos.

En nuestro país la inflación anual continúa afectando sobre todo los productos de la canasta básica, algunos cuyo costo es el doble al del año pasado, como el pollo y el limón. Unos 70 mil hogares chihuahuenses no alcanzan a cubrir la canasta básica, por lo cual están en pobreza alimentaria.

El gobierno federal para contrarrestar en algo los efectos de la inflación aplicó un paquete que incluye el control de los precios de 24 productos de la canasta básica llegando a un acuerdo con los grandes distribuidores de los mismos.

Esta medida es limitada y a corto plazo, por lo que no garantiza ser de gran impacto sino más bien es un intento de menguar los efectos inflacionarios inmediatos pues no está dirigido a combatir las causas principales.

Por ejemplo, subsidiar la gasolina para que no continúe subiendo de precio tendrá un costo anual de unos 400 mil millones de pesos, lo cual repercutirá en un déficit de las finanzas públicas.

Ahora bien, la mayoría de los factores inflacionarios son exógenos por lo que poco podría hacer el gobierno federal, más también no dejan de ser efecto de políticas económicas erróneas.

Así el bajo crecimiento económico pronosticado no garantiza la recuperación del país después del retroceso debido a la pandemia ya que no se presentan condiciones adecuadas para aumentar la inversión y el empleo.

A lo anterior se agrega el aumento alarmante de la migración debido a las crisis económicas y a la guerra en Ucrania. Un ejemplo de ello es el incremento notorio de cubanos en el país que huyen de la carestía y del desempleo en su país vendiendo para ello sus escasos bienes y aventurándose a enfrentar serios peligros con tal de llegar a los Estados Unidos.

Mas no sólo hay más emigrantes extranjeros, sino también nacionales que intentan cruzar la frontera norte para trabajar en el vecino país y contribuir al envío de remesas, la principal fuente de divisas nacional.

En cuanto al calentamiento global es alarmante el incremento de sequías e incendios en todo el orbe y sobre todo en el territorio nacional, ocupando Chihuahua uno de los primeros lugares.

En abril y mayo ya han predominado altas temperaturas que oscilan entre los 30 y 45 grados centígrados, lo que pronostica un verano seco y extremadamente caluroso con las consecuencias negativas para la economía y la salud de los mexicanos.

La perspectiva de la época postpandémica no es lo más favorable que se hubiera podido desear, por lo que además de la latente amenaza del regreso de la pandemia se tienen que afrontar los riesgos citados y otros más, lo cual desde luego no es el más deseado de los escenarios futuros por lo que debemos estar preparados para afrontarlos e intentar superarlos con los menores costos posibles.