/ martes 3 de marzo de 2020

Rendición de cuentas. I

“Engáñanse muchas veces los hombres creyendo que la humildad vence siempre a la soberbia.” N. Maquiavelo.


La relación biunívoca entre gobernados y gobernantes consiste en que los primeros: exigen, reivindican, todo aquello que signifique desarrollo y bienestar de sus comunidades. Los segundos, como mandatarios, deben: escuchar, recibir, conocer, discutir y aprobar los pedimentos de los ciudadanos, y, rendir cuentas. Los gobernantes, cumplen de acuerdo a la ley, en los regímenes republicanos, democráticos, representativos y federales. La paz será la resultante, es de reiterarse, con las naciones que ostentan tal régimen, de la absoluta y estricta observancia de la ley.

Durante la Colonia Española, la Real Audiencia, tenía facultades para vigilar que se cumplieran las ordenanzas de la monarquía absoluta –la voluntad del rey-, fundamentalmente en lo: administrativo, lo financiero y en lo político. La responsabilidad del manejo de tesoro público era supervisada de tal manera, que al concluir las funciones, el burócrata era sometido a los “juicios de residencia”, para que rindiera cuentas de las recaudaciones (pago de diversos impuestos), gastos, inversiones y existencia de activos. Se verificaban también, el estado de sus propiedades y posesión de bienes económicos, esto, para evitar o castigar a quienes se apropiaran de los recursos del erario (tesoro público).

En la actualidad se presentan fenómenos económicos y sociales que exhiben el estado de pobreza y de riqueza de la población. Las tentaciones de utilizar el erario a discreción por medio de programas asistencialistas y clientelares son muchas y, no pocas las administraciones lo hacen en beneficio personal o de grupo. Es entonces cuando los gobiernos que se ostentan como democráticos, caen en las tentaciones y actos de corrupción. Pero ¿qué significa, rendir cuentas? El término proviene de una traducción inexacta del vocablo anglo- sajón “account ability”, que significaba: “ser sujeto a la obligación de reportar, explicar o justificar algo, ser responsable de algo.” En la lengua española, no tiene la significación inglesa, sino simplemente: “rendición de cuentas”. En las democracias representativas son sujetos obligados, los votantes, a las asambleas y a los poderes judiciales. El elemento central es el control y vigilancia de los órganos del Estado por parte de otras instituciones, también estatales, pero autónomas, que ejercen funciones de fiscalización, velan por la legalidad y el cumplimiento de los actos y cumplimiento de las leyes.

“Engáñanse muchas veces los hombres creyendo que la humildad vence siempre a la soberbia.” N. Maquiavelo.


La relación biunívoca entre gobernados y gobernantes consiste en que los primeros: exigen, reivindican, todo aquello que signifique desarrollo y bienestar de sus comunidades. Los segundos, como mandatarios, deben: escuchar, recibir, conocer, discutir y aprobar los pedimentos de los ciudadanos, y, rendir cuentas. Los gobernantes, cumplen de acuerdo a la ley, en los regímenes republicanos, democráticos, representativos y federales. La paz será la resultante, es de reiterarse, con las naciones que ostentan tal régimen, de la absoluta y estricta observancia de la ley.

Durante la Colonia Española, la Real Audiencia, tenía facultades para vigilar que se cumplieran las ordenanzas de la monarquía absoluta –la voluntad del rey-, fundamentalmente en lo: administrativo, lo financiero y en lo político. La responsabilidad del manejo de tesoro público era supervisada de tal manera, que al concluir las funciones, el burócrata era sometido a los “juicios de residencia”, para que rindiera cuentas de las recaudaciones (pago de diversos impuestos), gastos, inversiones y existencia de activos. Se verificaban también, el estado de sus propiedades y posesión de bienes económicos, esto, para evitar o castigar a quienes se apropiaran de los recursos del erario (tesoro público).

En la actualidad se presentan fenómenos económicos y sociales que exhiben el estado de pobreza y de riqueza de la población. Las tentaciones de utilizar el erario a discreción por medio de programas asistencialistas y clientelares son muchas y, no pocas las administraciones lo hacen en beneficio personal o de grupo. Es entonces cuando los gobiernos que se ostentan como democráticos, caen en las tentaciones y actos de corrupción. Pero ¿qué significa, rendir cuentas? El término proviene de una traducción inexacta del vocablo anglo- sajón “account ability”, que significaba: “ser sujeto a la obligación de reportar, explicar o justificar algo, ser responsable de algo.” En la lengua española, no tiene la significación inglesa, sino simplemente: “rendición de cuentas”. En las democracias representativas son sujetos obligados, los votantes, a las asambleas y a los poderes judiciales. El elemento central es el control y vigilancia de los órganos del Estado por parte de otras instituciones, también estatales, pero autónomas, que ejercen funciones de fiscalización, velan por la legalidad y el cumplimiento de los actos y cumplimiento de las leyes.