/ martes 24 de abril de 2018

Ricardo Anaya ganó el debate

Ricardo Anaya mostró su temple, aportó propuestas, acorraló al que iba encabezando las encuestas, iba preparado con gráficas, fotografías, documentos probatorios de sus dichos, en una palabra, ganó el debate.

El que iba puntero en las encuestas (AMLO) se vio evasivo, como siempre, al no saber qué contestar en sus propuestas que ha hecho, pero contradictorias, ya que dependiendo de su auditorio, como dice una cosa, dice otra y ahora que sabía que el auditorio era de todo tipo, jóvenes, adultos, estudiantes, empresarios, gente del campo, no supo qué mentiras contar. Se vio muy mal.

AMLO se rajó de su propuesta de amnistía con los malandros, que había hecho públicamente en el estado de Guerrero, saliéndose por la tangente. El Bronco sorprendió con sus ataques directos a AMLO, a quien acorraló literalmente, lo puso contra las cuerdas, hasta que se rindió cuando le dice el Bronco que firme el acuerdo de devolver las prerrogativas que le da el gobierno para su campaña, para tener piso parejo para todos, y de plano AMLO se rajó.

Al principio del debate, todos estaban contra Ricardo Anaya, para Meade, el candidato a vencer y subir él al segundo lugar. Para AMLO, Ricardo Anaya es su competidor más cercano. Para Margarita, Anaya es el motivo de su renuncia al PAN, así que apuntó sus baterías sobre él. Sin embargo, a mitad del debate se dieron cuenta que AMLO era el candidato a vencer y entonces lo acorralaron y el puntero ya no sabía qué responder, aunque nunca ha sabido qué responder y menos ante un público tan variado.

A AMLO se le cuestionó muy duro y no hubo respuesta, ¿qué ha hecho por el país en los últimos veinte años? ¿De qué ha vivido, si no se le conoce actividad productiva? El Bronco llamó a AMLO “marrullero” y además que no ha aportado nada, le dijo, que era tan negativo, que si AMLO se desmayara, en lugar de volver en sí, volvería en “no”.

Meade fue el único que dijo su nombre cuando lo presentaron, ¿será que sabe que la gente no lo conoce? Hizo algunas propuestas, pero en general se vio gris y no pudo o no quiso desligarse del PRI y cuando se le cuestionó que siendo él secretario de Hacienda, 22 gobernadores del PRI estaban robando a manos llenas y él no hizo nada.

Poco espacio para un mejor análisis. Ricardo Anaya ganó.

Ricardo Anaya mostró su temple, aportó propuestas, acorraló al que iba encabezando las encuestas, iba preparado con gráficas, fotografías, documentos probatorios de sus dichos, en una palabra, ganó el debate.

El que iba puntero en las encuestas (AMLO) se vio evasivo, como siempre, al no saber qué contestar en sus propuestas que ha hecho, pero contradictorias, ya que dependiendo de su auditorio, como dice una cosa, dice otra y ahora que sabía que el auditorio era de todo tipo, jóvenes, adultos, estudiantes, empresarios, gente del campo, no supo qué mentiras contar. Se vio muy mal.

AMLO se rajó de su propuesta de amnistía con los malandros, que había hecho públicamente en el estado de Guerrero, saliéndose por la tangente. El Bronco sorprendió con sus ataques directos a AMLO, a quien acorraló literalmente, lo puso contra las cuerdas, hasta que se rindió cuando le dice el Bronco que firme el acuerdo de devolver las prerrogativas que le da el gobierno para su campaña, para tener piso parejo para todos, y de plano AMLO se rajó.

Al principio del debate, todos estaban contra Ricardo Anaya, para Meade, el candidato a vencer y subir él al segundo lugar. Para AMLO, Ricardo Anaya es su competidor más cercano. Para Margarita, Anaya es el motivo de su renuncia al PAN, así que apuntó sus baterías sobre él. Sin embargo, a mitad del debate se dieron cuenta que AMLO era el candidato a vencer y entonces lo acorralaron y el puntero ya no sabía qué responder, aunque nunca ha sabido qué responder y menos ante un público tan variado.

A AMLO se le cuestionó muy duro y no hubo respuesta, ¿qué ha hecho por el país en los últimos veinte años? ¿De qué ha vivido, si no se le conoce actividad productiva? El Bronco llamó a AMLO “marrullero” y además que no ha aportado nada, le dijo, que era tan negativo, que si AMLO se desmayara, en lugar de volver en sí, volvería en “no”.

Meade fue el único que dijo su nombre cuando lo presentaron, ¿será que sabe que la gente no lo conoce? Hizo algunas propuestas, pero en general se vio gris y no pudo o no quiso desligarse del PRI y cuando se le cuestionó que siendo él secretario de Hacienda, 22 gobernadores del PRI estaban robando a manos llenas y él no hizo nada.

Poco espacio para un mejor análisis. Ricardo Anaya ganó.