/ lunes 29 de abril de 2024

Día Mundial de la Seguridad Laboral: urgencia de cuidar cada vida en la industria

Cada día, 500,000 trabajadores industriales en nuestro estado inician temprano una nueva jornada, enfrentando la oportunidad y el reto de ir al trabajo para encontrar plenitud y sustento para sus hogares, confiando en que regresarán sanos y salvos. El 28 de abril, Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, reflexionamos sobre la gran responsabilidad que, como empresarios y líderes comunitarios, tenemos de proteger la salud física y emocional de nuestros equipos.

La Doctrina Social de la Iglesia reconoce la posible tensión entre capital y trabajo, advirtiendo el riesgo de descuidar a las personas por enfocarse solo en la rentabilidad. La responsabilidad social empresarial comienza por establecer condiciones seguras y saludables en el trabajo.

La dignidad de las personas nos obliga a crear condiciones seguras y además facilita la continuidad de operaciones, baja la prima de riesgo, cuida la reputación de la empresa y previene el dolor ajeno. Toda empresa debería tener claro que ningún trabajo vale la pena ser realizado si pone en riesgo la vida de una persona y el riesgo colateral a su familia.

Información de la STPS, el IMSS y la OMS estima que en 2023 hubo 400,000 accidentes laborales en México de los cuáles 340 fallecieron y 4,790 sufrieron incapacidad permanente. No debemos aceptar estos números como estadística pura, son personas y familias que han sufrido daños irreparables.

Estudios del IMSS indican que muchos accidentes ocurren por actos inseguros de los trabajadores, existiendo prácticas empresariales que pueden fomentar una cultura de prevención. Es vital convencerse de que una vida vale más que cualquier negocio y por ello hay que asumir un liderazgo humano, definir políticas claras y empoderar a los trabajadores para que las apliquen, tener mecanismos de auditoría y rutinas diarias para reforzarlas. También es crucial monitorear el estado emocional de los trabajadores, especialmente en tareas de alto riesgo, para garantizar su concentración y seguridad.

La formación ética en la capacitación es esencial. Los cursos DC3 son cruciales para las tareas de riesgo, asegurando que los trabajadores estén debidamente preparados en teoría y práctica antes de comenzar cualquier labor. La formalidad y la seguridad social también son clave para proteger a las familias en casos de incapacidad.

Recientemente, platicando con mi equipo de trabajo veíamos la importancia de tener muy clara la importancia de la seguridad, que no podríamos perdonarnos ni quisiéramos tener que encarar a un familiar de alguno de ellos para dar una noticia de esa naturaleza y concluímos que cada día, todos deberían poner su máxima conciencia y empeño en mantenerse a salvo y cuidar de los demás. La empresa proporciona la capacitación y los medios de protección, y los trabajadores deben cuidarse con cada decisión que toman.

Este Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, hagamos consciente la gran tarea que tenemos de cuidar vidas y familias que están bajo nuestra responsabilidad.


Ing. Industrial, Presidente de Canacintra en Chihuahua

Cada día, 500,000 trabajadores industriales en nuestro estado inician temprano una nueva jornada, enfrentando la oportunidad y el reto de ir al trabajo para encontrar plenitud y sustento para sus hogares, confiando en que regresarán sanos y salvos. El 28 de abril, Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, reflexionamos sobre la gran responsabilidad que, como empresarios y líderes comunitarios, tenemos de proteger la salud física y emocional de nuestros equipos.

La Doctrina Social de la Iglesia reconoce la posible tensión entre capital y trabajo, advirtiendo el riesgo de descuidar a las personas por enfocarse solo en la rentabilidad. La responsabilidad social empresarial comienza por establecer condiciones seguras y saludables en el trabajo.

La dignidad de las personas nos obliga a crear condiciones seguras y además facilita la continuidad de operaciones, baja la prima de riesgo, cuida la reputación de la empresa y previene el dolor ajeno. Toda empresa debería tener claro que ningún trabajo vale la pena ser realizado si pone en riesgo la vida de una persona y el riesgo colateral a su familia.

Información de la STPS, el IMSS y la OMS estima que en 2023 hubo 400,000 accidentes laborales en México de los cuáles 340 fallecieron y 4,790 sufrieron incapacidad permanente. No debemos aceptar estos números como estadística pura, son personas y familias que han sufrido daños irreparables.

Estudios del IMSS indican que muchos accidentes ocurren por actos inseguros de los trabajadores, existiendo prácticas empresariales que pueden fomentar una cultura de prevención. Es vital convencerse de que una vida vale más que cualquier negocio y por ello hay que asumir un liderazgo humano, definir políticas claras y empoderar a los trabajadores para que las apliquen, tener mecanismos de auditoría y rutinas diarias para reforzarlas. También es crucial monitorear el estado emocional de los trabajadores, especialmente en tareas de alto riesgo, para garantizar su concentración y seguridad.

La formación ética en la capacitación es esencial. Los cursos DC3 son cruciales para las tareas de riesgo, asegurando que los trabajadores estén debidamente preparados en teoría y práctica antes de comenzar cualquier labor. La formalidad y la seguridad social también son clave para proteger a las familias en casos de incapacidad.

Recientemente, platicando con mi equipo de trabajo veíamos la importancia de tener muy clara la importancia de la seguridad, que no podríamos perdonarnos ni quisiéramos tener que encarar a un familiar de alguno de ellos para dar una noticia de esa naturaleza y concluímos que cada día, todos deberían poner su máxima conciencia y empeño en mantenerse a salvo y cuidar de los demás. La empresa proporciona la capacitación y los medios de protección, y los trabajadores deben cuidarse con cada decisión que toman.

Este Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, hagamos consciente la gran tarea que tenemos de cuidar vidas y familias que están bajo nuestra responsabilidad.


Ing. Industrial, Presidente de Canacintra en Chihuahua