/ jueves 11 de noviembre de 2021

Perfil humano | La postergación de la votación de la Reforma de Energía Eléctrica

El coordinador de la bancada de diputados federales de Morena anunció que se votaría la criticada Reforma Eléctrica hasta el mes de abril del año entrante en lugar de hacerlo en diciembre de este año.

Tal parece ser que las cosas no marchaban muy bien para sacar adelante la polémica iniciativa presidencial que le otorgaría a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) mayores facultades para controlar la energía eléctrica en el país, en demérito de las energías renovables, lo cual ha causado serias oposiciones internacionales como la de algunos sectores estadounidenses.

De acuerdo a varios columnistas, la decisión de congelar por lo pronto la reforma se debió en buena parte al cabildeo del embajador norteamericano Ken Salazar en Palacio Nacional y en la Cancillería mexicana.

El diplomático estadounidense ha recibido bastantes quejas por parte de compañías de su país sobre la nueva reglamentación que se pretende aplicar en el sector eléctrico.

Algunas de las empresas afectadas ya iniciaron demandas por considerarlas violatorias de contratos previos y de medidas establecidas en el T-MEC. Podrían incluso iniciar juicios legales que le costarían bastante al gobierno mexicano si aplicara las nuevas reglas del juego.

A ello se agregan las protestas de organizaciones ecológicas, pues señalan que sería un retroceso al no aplicar los Acuerdos de París, pues la CFE privilegiaría el uso de energías de combustibles fósiles en lugar de auspiciar el de las energías renovables, como la solar y la eólica.

En este momento en que la atención internacional se focaliza en la COP26 y sus propuestas para reducir el calentamiento global y evitar los graves efectos del actual cambio climático, la propuesta presidencial es altamente criticable, por lo que también puede haber influido este ambiente adverso sobre todo ahora, cuando se presente el presidente en la ONU.

Otra causa para postergar la votación pudo haber sido que no completaron los diputados morenistas los votos de apoyo necesarios de algunos colegas de otro partido. Existió el rumor de que los priistas iban a respaldar la reforma, pero todo indica que no se concertó tal alianza, pues en el mismo tricolor sus posiciones no están definidas después de su reciente derrota electoral.

Hay que recordar al PRI como el partido más afectado en las elecciones de este año, pues perdió el mayor número de gubernaturas y apenas pudo sacar adelante algunos triunfos aliándose con el PAN y el PRD, aunque este último partido se quedó sin la única Gubernatura que tenía, o sea la de Michoacán.

También pudo ser un factor para posponer la elección legislativa el que existe división en las filas morenistas sobre algunas propuestas de la iniciativa, por lo que no existía la seguridad de sacarla adelante sin problema alguno.

Ahora bien, sean cuales hayan sido las causas para postergar la Reforma Eléctrica no deja de ser positivo que se haya hecho, pues habría más tiempo para que se discutan los pros y contras de la misma en forma pública y crítica.

En este año apenas México vuelve a crecer en su economía, aunque sea de rebote, ya que este sexenio ha sido negativo pues en el primer año hubo un cero aumento del PIB y el año pasado el PIB fue de menos el ocho por ciento.

Con el grave riesgo de que inversiones multimillonarias puedan ser canceladas no sólo por parte del vecino país, sino también de Europa, se debe analizar si este alto costo vale la pena para consolidar el control estatal de la energía eléctrica o no. Además se tienen que evaluar sus efectos nocivos en el medio ambiente, por hoy el principal problema que afecta a todo el planeta.


El coordinador de la bancada de diputados federales de Morena anunció que se votaría la criticada Reforma Eléctrica hasta el mes de abril del año entrante en lugar de hacerlo en diciembre de este año.

Tal parece ser que las cosas no marchaban muy bien para sacar adelante la polémica iniciativa presidencial que le otorgaría a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) mayores facultades para controlar la energía eléctrica en el país, en demérito de las energías renovables, lo cual ha causado serias oposiciones internacionales como la de algunos sectores estadounidenses.

De acuerdo a varios columnistas, la decisión de congelar por lo pronto la reforma se debió en buena parte al cabildeo del embajador norteamericano Ken Salazar en Palacio Nacional y en la Cancillería mexicana.

El diplomático estadounidense ha recibido bastantes quejas por parte de compañías de su país sobre la nueva reglamentación que se pretende aplicar en el sector eléctrico.

Algunas de las empresas afectadas ya iniciaron demandas por considerarlas violatorias de contratos previos y de medidas establecidas en el T-MEC. Podrían incluso iniciar juicios legales que le costarían bastante al gobierno mexicano si aplicara las nuevas reglas del juego.

A ello se agregan las protestas de organizaciones ecológicas, pues señalan que sería un retroceso al no aplicar los Acuerdos de París, pues la CFE privilegiaría el uso de energías de combustibles fósiles en lugar de auspiciar el de las energías renovables, como la solar y la eólica.

En este momento en que la atención internacional se focaliza en la COP26 y sus propuestas para reducir el calentamiento global y evitar los graves efectos del actual cambio climático, la propuesta presidencial es altamente criticable, por lo que también puede haber influido este ambiente adverso sobre todo ahora, cuando se presente el presidente en la ONU.

Otra causa para postergar la votación pudo haber sido que no completaron los diputados morenistas los votos de apoyo necesarios de algunos colegas de otro partido. Existió el rumor de que los priistas iban a respaldar la reforma, pero todo indica que no se concertó tal alianza, pues en el mismo tricolor sus posiciones no están definidas después de su reciente derrota electoral.

Hay que recordar al PRI como el partido más afectado en las elecciones de este año, pues perdió el mayor número de gubernaturas y apenas pudo sacar adelante algunos triunfos aliándose con el PAN y el PRD, aunque este último partido se quedó sin la única Gubernatura que tenía, o sea la de Michoacán.

También pudo ser un factor para posponer la elección legislativa el que existe división en las filas morenistas sobre algunas propuestas de la iniciativa, por lo que no existía la seguridad de sacarla adelante sin problema alguno.

Ahora bien, sean cuales hayan sido las causas para postergar la Reforma Eléctrica no deja de ser positivo que se haya hecho, pues habría más tiempo para que se discutan los pros y contras de la misma en forma pública y crítica.

En este año apenas México vuelve a crecer en su economía, aunque sea de rebote, ya que este sexenio ha sido negativo pues en el primer año hubo un cero aumento del PIB y el año pasado el PIB fue de menos el ocho por ciento.

Con el grave riesgo de que inversiones multimillonarias puedan ser canceladas no sólo por parte del vecino país, sino también de Europa, se debe analizar si este alto costo vale la pena para consolidar el control estatal de la energía eléctrica o no. Además se tienen que evaluar sus efectos nocivos en el medio ambiente, por hoy el principal problema que afecta a todo el planeta.